Redacción Sierra Centro
El auditorio Club 700 del edificio del Sindicato de Choferes de Tungurahua, situado en el centro de Ambato, estuvo hoy lleno. Ponchos rojos y lucían los asistentes. Otros llevaban grandes collares rojos y negros.
Desde las 08:00 decenas de indígenas delegados de la Costa, la Sierra y la Amazonia arribaron al auditorio. Ahí se realiza la Asamblea Extraordinaria de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) para definir si continúan o no los diálogos con el Gobierno. Las mesas se establecieron en octubre pasado luego de un levantamiento indígena contra el proyecto de Ley de Aguas. Un indígena shuar murió durante la medida.
Según Manuel Ainaguano, presidente del Movimiento Indígena del Tungurahua, asistieron al encuentro 500 representantes. A las 10:30, Marlon Santi, presidente de la Conaie, inauguró la asamblea.
Entre los asistentes estuvieron los asambleístas Lourdes Tibán, Jerónimo Yantalema, Jorge Escala (MPD), Jorge Guamán, coordinador político de Pachakutik, Ángel Medina, secretario del Consejo de las Nacionalidades Indígenas (Codenpe), entre otros.
A puerta cerrada los dirigentes analizaron por más de siete horas el proceso que se mantuvo con el Gobierno en las mesas de diálogo y el avance de los proyectos de Ley que tramita la Asamblea Nacional.
Según Santi se determinó que el principal problema durante el diálogo fue la falta de voluntad política por parte del Gobierno para llegar a consensos en temas como el agua, la educación bilingüe, el petróleo, el medio ambiente y la explotación minera.
“Estamos reflexionado, conversando de por qué fracasaron las mesas. De las conclusiones dependerá nuestra decisión de realizar una movilización indígena o no”, sostuvo.
Mañana la Conaie anunciará si va o no al levantamiento. Habrá una rueda de prensa en la tarde.