Chefs y colectivos protestan en los exteriores de la Asamblea Nacional por la Ley de Agrobiodiversidad, Semillas y Fomento de la Agricultura Sustentable que permitiría el ingreso al país de semillas y cultivos transgénicos. Foto: Ana Belén Veintimilla/ SABORES
Este 1 de junio, la Asamblea Nacional se allanó al veto presidencial a la Ley de Agrobiodiversidad, Semillas y Fomento de la Agricultura Sustentable. Con 73 votos a favor de allanarse al veto, se permitiría el ingreso de semillas y cultivos transgénicos para fines investigativos.
Desde la aprobación de la Comisión de Soberanía Alimentaria de la Asamblea Nacional, realizado el martes 23 de junio, varios miembros del gremio culinario se han sumado a una campaña en redes sociales llamada #Ecuadorlibredetransgénicos. Con esa etiqueta chefs, de todo el Ecuador buscaban crear conciencia sobre el veto presidencial.
Este 1 de junio se realizó un plantón frente a la Asamblea Nacional para promover esta campaña. Eduard Pinzón, miembro del colectivo Agroecológico del Ecuador, señala que sus miembros se oponen a la apertura que se da a los transgénicos a través de la investigación porque lo consideran un riesgo. “Creemos que la investigación es la puerta de entrada a los transgénicos a escala comercial”.
Para el colectivo los riesgos incluyen la pérdida de la agrobiodiversidad y el desplazamiento de la agricultura familiar campesina, “la cual provee entre el 64 y el 70% de los alimentos en Ecuador”. En este sentido, señala que los transgénicos en investigación pueden tener cercanía con los campos agroecológicos y se dificulta controlar la migración del polen, lo que puede afectar a las producciones. “Cuando pierdes una variedad, no pierdes solo lo que hay respecto a la agricultura sino también al conocimiento ancestral que hay con respecto al consumo de ese alimento”.
Para el chef Esteban Tapia, miembro de Slow Food Ecuador, quien estuvo presente en el plantón, la pérdida de la agrobiodiversidad también es una pérdida de la soberanía alimentaria. Frente a la aprobación de la Asamblea, señala que trabajarán en una demanda de inconstitucionalidad. Pero para ellos la difusión de los riesgos es lo más importante.
Los consumidores, dice Tapia, pueden exigir ciertas demandas como procesos de etiquetado, “para un consumo libre e informado”. Señala que también se buscará promover el apoyo a los cultivos agro ecológicos para mover el consumo de estos alimentos.
La jornada se cerró con un foro en la Universidad Andina.