Aspirantes universitarios y padres de familia protestaron frente a la Secretaría de Educación Superior (Senescyt). Reclamaron que jóvenes con menor puntaje obtuvieron un cupo, mientras que los manifestantes aseguran haber postulado con calificaciones superiores a 900 sobre 1 000.
María Cristina Aguirre, subsecretaria de acceso a la Educación Superior, explicó que esto se puede dar por el orden de asignación de cupos que contempla el Reglamento del Sistema Nacional de Nivelación y Admisión. Esta norma rige desde este segundo período académico del 2022.
Los más de 123 000 cupos disponibles para este período se asignaron primero al grupo de mérito académico. Para este período, Aguirre dijo que este grupo representó menos del 1% del total de postulantes, exactamente 19 personas.
Después siguió el grupo de mayor vulnerabilidad socioeconómica y una vez concluida la asignación a estos aspirantes se empieza con los bachilleres recientemente graduados en el mes de julio, con prioridad para los de pueblos y nacionalidades.
Los bachilleres de promociones pasadas son últimos en el orden de prioridad
Al final se asignan los cupos a la población general, es decir a los bachilleres graduados en años anteriores. Esto implica que los pocos cupos disponibles para carreras con alta demanda podrían terminarse en los primeros grupos, señaló Aguirre. Además dijo que esta política pública busca cerrar brechas respecto de las oportunidades que tienen las personas más vulnerables.
Asimismo, la subsecretaria explicó la razón por la que una persona con un puntaje menor pudo obtener un cupo para una carrera muy demandada como Medicina. Señaló que se debe a que esa persona seguramente pertenece a los primeros grupos en el orden de prioridad, por ejemplo, al de vulnerabilidad.
Mientras, un aspirante con mayor puntaje puede no obtener cupo por encontrarse en uno de los siguientes grupos, por ejemplo, en el de la población en general. Por lo tanto, el aspirante con menor puntaje es, a la vez, el que tuvo el puntaje suficiente para acceder a un cupo, con respecto a los otros aspirantes de su mismo grupo.
Los problemas son en carreras con mayor demanda
La subsecretaria señala que los inconvenientes por los que se dieron las protestas no se presentan en todas las carreras, sino en las que tienen más demanda. Estas siguen siendo Medicina, Derechos e Ingenierías.
Para la segunda postulación, que será el 18 y 19 de octubre, están disponibles 43 372 cupos. Aguirre señaló que hay disponibilidad en una variedad de carreras, incluidas las del área de la salud, aunque no sea específicamente Medicina.
También mencionó a carreras técnicas en las que al país le hacen falta profesionales, entre ellas Desarrollo de Software.
La subsecretaria dijo que la priorización por grupos de aspirantes ha permitido que personas que nunca podían acceder a un cupo lo hagan. Además recordó que el número de cupos depende de cada universidad.
En agosto pasado, cuando la Senescyt anunció el nuevo sistema de asignación de cupos, se informó que la reforma la deberán aplicar también las universidades cuando se hagan cargo del proceso de admisión. De acuerdo con el nuevo Reglamento a la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES), esto será desde el primer período académico del 2023.
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