Los miradores se ubican en cuatro comunidades del noroccidente del cantón. Foto: Prefectura de Cotopaxi y Municipio de Saquisilí
Cuatro comunidades indígenas de Saquisilí promocionan su gastronomía, cascadas, miradores y ferias artesanales. A estos atractivos se puede llegar luego de recorrer chaquiñanes y caminos de segundo orden desde las comunas y el centro del cantón.
En el camino se pueden ver pastizales y sembríos de maíz, papas, cebada, cebolla y otros que son cosechados por los indígenas del norte de Cotopaxi.
Esta iniciativa tiene el apoyo de los Cabildos y la Unidad de Gestión Turística del Municipio de Saquisilí que identificó las zonas y las promociona a los visitantes nacionales y extranjeros.
“El turista puede recorrer y conocer la historia de nuestras comunidades a través del turismo”, aseguró la técnica de turismo Raquel Vargas.
En la comunidad Jatunera de la parroquia Cochapamba se encuentran las cascadas de Candela Fazo. Los turistas deben recorrer dos kilómetros desde la comunidad hasta el salto de agua que se forma de los ríos Pucayacu y Pumacunchi.
La caminata de entre 25 y 35 minutos permite al aventurero observar las aves, pastizales, pajonales puma maquis, achupallas y un sinnúmero de plantas nativas de la zona andina. La recompensa final es observar la caída del agua de aproximadamente 300 metros de altura que está escondida entre las montañas.
Manuel Chicaiza fue parte de la excursión que organizó el Cabildo a la zona turística.
El excursionista junto con su familia recorrió la zona que es desconocida en la provincia. “Hay un potencial turístico que debe ser difundido para que los visitantes la conozcan”, indicó Chicaiza.
Otro de los saltos naturales de agua es la laguna de Tiloncocha, ubicada a 37 kilómetros de la zona urbana de Saquisilí. El viajero debe arribar a la parroquia Cochabamba y luego dirigirse a las comunidades de Llamahuasi y Chanchungaloma.
Para arribar a la zona el visitante requiere de una hora y treinta minutos en vehículo y luego una pequeña caminata de 15 a 20 minutos.
“En la zona hay una diversidad de fauna y flora propia de los parajes andinos. Las comunidades también ofertan platos típicos”, contó Vargas.
Otros atractivos son los miradores naturales del Wingopana, localizados en la comunidad de Yanahurco de la parroquia Saquisilí. La formación natural rocosa es de fácil acceso y desde esta zona se aprecia la ‘Avenida de los volcanes’. Los indígenas explican que el mirador es utilizado para los rituales y ceremonias por parte de yachaks o curanderos de la zona.
“Su ubicación emana energía de la Pachamama y es un sitio propicio para estas actividades ancestrales”, indica Vargas.
Además, se pueden realizar caminatas, cabalgar por los páramos, descender en bicicleta por los chaquiñanes y tomar fotografías de la flora y fauna.
El visitante también puede recorrer las plazas Juan Montalvo, Gran Colombia, 18 de Octubre y Rastro. Además de las plazas Vicente Rocafuerte, Kennedy y San Juan Bautista.
En estos centros de expendio puede encontrar legumbres, hortalizas, papas, abarrotes y otros. También se comercializan bovinos, equinos, porcinos, aves de corral, cuyes, conejos y animales domésticos.
Rosa Tocto es una de las comerciantes de artesanías, textiles y otros productos en la plaza 18 de Octubre. Ella expende junto con los comerciantes de Otavalo, Cotacahi, Tigua y otras comunidades del cantón en el mercado.