La película ‘Lightyear’ recuperará la escena del beso ‘prohibido’ entre dos mujeres. El ‘spin off’ de ‘Toy Story’ llegará a las salas de cine en Ecuador el próximo 18 de junio.
La cinta cuenta la historia del astronauta real que inspiró el diseño del famoso juguete que aparece en la saga animada de ‘Toy Story’. El filme producida por Pixar Animation Studios para Disney es dirigida por Angus MacLane.
Le decisión se tomó en un momento en que la compañía dirigida por Bob Chapek enfrenta serios cuestionamientos por parte de los empleados de Pixar y del colectivo Glbti+. La crítica es ante la discreta postura sobre una polémica ley denominada ‘Don’t say gay’ (‘No digas gay’).
Un beso que fue censurado
‘Lightyear’ fue pensada como una historia de origen de Buzz Lightyear. Esta también presenta a Hawthorne, un personaje femenino con la voz de Uzo Aduba, que mantiene una relación afectiva con otra mujer.
Una fuente cercana a la producción declaró a Variety que, si bien la relación gay entre estos dos personajes no fue cuestionada en el estudio, sí se eliminó la escena de un beso entre las dos mujeres.
Al parecer, las muestras de afecto entre personas con preferencias sexuales distintas a las heteronormativas son objeto de polémica en el mundo de la animación.
La censura va más allá de una película
La noticia sobre la escena del beso gay ‘prohibido’ por Disney en ‘Lightyear’ trascendió a la opinión pública a través de los propios empleados de Pixar.
El pasado 9 de marzo, los empleados y sus aliados Glbti+ de Pixar emitieron un comunicado. En el documento se alega que los ejecutivos corporativos de Disney habrían exigido recortes de “casi todos los momentos de afecto abiertamente gay”.
La acusación contradice la postura pública de Chapek. El CEO de Disney afirma, en un memorando interno, que el impacto de la empresa “en la creación de un mundo más inclusivo es a través del contenido inspirador que producimos”.
La declaración de los empleados de Pixar va más allá de la censura en ‘Lightyear’. También surge como una reacción ante la falta de una postura decisiva sobre la ley ‘Don’t Say Gay’.
Esta ley, aprobada por el Comité de Educación del Senado de Florida, prohíbe la enseñanza sobre temas de diversidad sexual y género en las escuelas, antes del tercer grado. Además, deja abierta la puerta para iniciar demandas en contra del distrito escolar o los maestros que incumplan.
En las últimas semanas, Disney se vio vinculada a los políticos que impulsan esta polémica ley. En un intento por desmarcarse de la controversia, Chapek anunció que retiraría todos los donativos que se hacía a los políticos de Florida.
Sin embargo, la medida no fue suficiente y se han realizado varias protestas frente a las instalaciones de Disney. A esto se sumaron las acusaciones de censura en temas de diversidad al interior de Pixar.