El festival EDOC dedica dos secciones a la filmografía de no ficción local, con historias de dentro y fuera del país. Foto: Cortesía
El Ecuador y sus documentalistas nuevamente son protagonistas en la decimoquinta edición del Festival EDOC, que se celebra hasta el próximo 31 de mayo en Quito y hasta el 3 de junio en Guayaquil. En la selección hay cuatro producciones nacionales en estreno.
Un conjunto de 17 filmes distribuidos en dos secciones habla de una producción documental que crece con el tiempo, con miradas que se expanden en la diversidad de personajes y escenarios y que, al igual que la ficción nacional, reclaman su propio espacio para mostrarse al mundo.
Manolo Sarmiento, director del festival, lo ratifica: el documental ecuatoriano ha experimentado un gran desarrollo. “Sin embargo, aún hay un déficit en la televisión, que no se compromete a producir y coproducir documentales”, dice Sarmiento sobre los espacios aún por conquistar.
Hace 15 años, junto con los EDOC, se inauguraba ‘Cómo nos ven, cómo nos vemos’, una sección que dejaba abierta esa inquietud sobre la representación de un país, su memoria y su gente vista a través del lente de una cámara. Por esa ventana han pasado algunos de los estrenos nacionales más taquilleros como ‘Con mi corazón en Yambo’, de María Fernanda Restrepo o ‘La muerte de Jaime Roldós’, de Manolo Sarmiento.
Este año, la sección agrupa una decena de filmes que retratan historias como la de ‘Dreamtown’, sobre un niño que sueña con convertirse en una estrella del fútbol. La ecuatoriana Betty Bastidas es la documentalista que sigue durante seis años la trayectoria de Aníbal Chalá, que actualmente juega en El Nacional.
Ecuatorianos desahuciados en España (‘Sueños hipotecados’), ejercicios contemplativos en busca de un territorio y un sentido (‘Persistencia’, ‘Territorio’), momentos y personajes que revelan la compleja identidad de una sociedad (‘La carga’, ‘El reloj de Velasco Ibarra’, ‘El mural’, ‘El tren deja los pueblos’, ‘El cóndor pasa’) hacen del Ecuador un término de reflexión y memoria. ‘Mi tía Toty’, que se estrena hoy, es otro de los retratos a través de los cuales se puede acceder a un país y a una cultura valiéndose de la memoria.
Pero así como hay miradas que se vuelcan sobre el Ecuador también hay ecuatorianos que se inquietan por descubrir otras realidades fuera de sus fronteras. ‘Cómo los vemos’ es una de las novedades de los Edoc 2016, como una sección que ofrece siete historias contadas por ecuatorianos desde Estados Unidos (‘Ozoners’), Argentina (‘Speed Paradise’, ‘Somos invencibles’, ‘Bo’), Francia (‘Pays Castor’), Hungría (‘Hello Sea!’) y Brasil (‘Derivadas’).