Tras nueve años de espera, la mañana de este martes 27 de septiembre, el Pleno de la Asamblea Nacional, se reunió para debatir el proyecto de Ley de Cultura. Sin embargo, al mediodía, la presidenta encargada Rosana Alvarado suspendió la sesión.
En el punto en el que se suspendió el debate aún quedaban pendiente las intervenciones de 16 asambleístas (a un promedio de 10 minutos por cada una). La primera estuvo a cargo de Ximena Ponce, vicepresidenta de la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología.
La asambleísta de AP lamentó que en los últimos meses los debates sobre la ley se hayan centrado en la institucionalidad de la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CCE) y habló sobre la importancia de la existencia del Sistema Nacional de Cultura y las instituciones que la integran.
En el transcurso de la mañana, la observación de Ponce cayó en el olvido porque el tema recurrente en la intervención de los asambleístas se centró en los articulados que hablan, precisamente, sobre la CCE.
Entre los puntos reiterativos en relación a esa institución estuvieron la forma en que se elegirán a sus autoridades, su autonomía y el trabajo que se hace desde los núcleos.
Una de las novedades que presenta la ley es que no existirá el Instituto de Memoria Social, que constaba en el último borrador que la Comisión de Educación y Cultura subió a su blog. Entre las atribuciones que iba a tener este instituto estaba la gestión de los repositorios pertenecientes al Ministerio de Cultura como archivos, museos y bibliotecas.
Lo que sí se confirmó fue la creación del Instituto de Fomento para las Artes, Innovación y Creatividad y del Instituto de Cine y Audiovisual. Con un puñado del gremio de payasos en las barras altas de la Asamblea como únicos espectadores, intervinieron asambleístas como Gastón Gagliardo, Rosa Muñoz y Luis Fernando Torres, quien reconoció que la aprobación de la ley es necesaria pero tiene puntos que deben ser corregidos como el impuesto del 10% sobre las totalidad de las entradas para películas extranjeras que se proyectan en las salas locales.
El asambleísta Ramiro Aguilar fue enfático al decir que se debe eliminar esta propuesta porque la Ley de Cultura no es una ley tributaria. Se espera que el debate y la votación de la ley se retomen el próximo martes 4 de octubre de 2016.