En medio de un confuso incidente, el subsecretario de Agricultura, Rafael Guerrero, fue expulsado del Museo Municipal la noche del viernes, durante la ceremonia de premiación de los ganadores del Salón de Julio de este año.
“Abajo la represión, abajo Melvin Hoyos. Viva la libertad de expresión, arriba los artistas que no fueron tomados en cuenta para el salón”, fueron los gritos de Guerrero al entrar al auditorio del Museo.
Luego de gritar en medio de la ceremonia, Guerrero salía del auditorio del Museo Municipal, cuando fue alcanzado por guardias del lugar, policías metropolitanos y otras personas de seguridad, quienes lo redujeron al piso y lo sacaron del museo, a pesar de los reclamos de algunos asistentes sobre este acto. “Lo que hizo está mal, pero tampoco es para que se lo trate así”, dijo una de las personas del público.
A pesar del incidente y los gritos, la ceremonia continuó con normalidad a pesar del tenso momento. Guerrero, la mañana de este sábado, se negó a comentar el incidente. El funcionario es padre de la artista Graciela Guerrero, quien fue parte de la exhibición ‘Playlist’, que se presentó en el Museo Municipal en enero del 2010 (con curaduría de Rodolfo Kronfle), en que ella exponía una escultura de un hombre negro violando a un menor.
Este año el certamen se vio envuelto en la polémica por la prohibición de que se presenten obras que contengan sexo explícito, lo cual fue considerado por muchos artistas como una “censura previa”. Aún así, este año se presentaron 149 obras para ser parte del Salón de Julio. Un jurado de pre selección, integrado por Christian Parreño, Hugo Lara y Jorge Velarde, se encargó de dejar las 25 obras finales.
La ceremonia, que empezó a las 19:00, era la premiación oficial de los tres ganadores del salón, cuyo primer premio fue para la obra ‘Non signal’, de José Hidalgo, un trabajo realizado a base de esferográfico azul, sobre cartulina plegable.
El segundo premio fue para Marco Restrepo, profesor del ITAE (Instituto Superior Tecnológico de Arte del Ecuador), por su obra ‘El efecto de algunos deseos’; y el tercer puesto fue para la instalación de Fabio Bajaña, ‘Proyecciones en el espacio’, una obra hecha a base de materiales de poco valor, como hojas de una guía telefónica, como una crítica a la institucionalidad.
También se entregaron cuatro menciones de honor: para Lenin Mera, por su obra ‘Salpicadas, escuela de la perturbación’; Anthony Arrobo, por ‘Tired paintings’; Miguel Muñoz, por ‘Oleograma’; y Javier Gavilanes, por ‘Contraposición’.
El Salón de Julio estará en exhibición hasta el 22 de agosto.