Los pigmeos de las islas Andaman contienen en su genoma fragmentos de ADN de la especie de homínidos extinta. Foto: www.ibe.upf-csic.es
Científicos del Instituto de Biología Evolutiva (IBE) de Barcelona descubrieron un nuevo tipo de homínido actualmente extinguido, que vivió en el sureste asiático y parte de cuyo ADN se encuentra en los aborígenes pigmeos de las islas Andamán, que forman parte de la India.
Según la investigación, que publica este lunes 25 de julio de 2016 la revista Nature Genetics, esta especie no descrita hasta ahora es un antecesor de los humanos, igual que los neandertales o los denisovanos entre sí, y se cruzó con los humanos modernos hace decenas de miles de años.
Los primeros autores del estudio son Mayukh Mondal y Ferran Casals, investigadores del IBE, un centro mixto de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), en colaboración con Partha Majumdar, del Instituto Nacional de Genómica Biomédica de la India.
El análisis genético de un grupo de habitantes de las islas Andamán, al norte de Indonesia, frente a las costas de Birmania y Tailandia, en el océano Índico, revela que su ADN contiene fragmentos que no corresponden a los humanos modernos que salieron de África hace unos 80 000 años.
Al comparar estas secuencias con las de los neandertales y denisovanos, los científicos del IBE vieron que también son diferentes y concluyeron que este ADN pertenece a un homínido extinto que comparte un ancestro común con los otros dos, pero que tiene una historia diferenciada.
Según explicó el investigador principal del IBE y catedrático de Biología y Antropología de la UPF, Jaume Bertranpetit, esta es una nueva prueba de que el genoma humano contiene pequeñas cantidades de información proveniente de antepasados extinguidos.
“Hemos encontrado fragmentos de ADN del homínido extinto formando parte del genoma de los humanos modernos. En un futuro próximo esperamos obtener el genoma completo a partir de restos fósiles“, anunció.
El catedrático explicó que hace unos 80 000 años, el Homo sapiens arcaico evolucionó a hombre moderno en África, pero una pequeña parte de la población abandonó el continente y dio lugar a todas las poblaciones humanas fuera de África.
Sin embargo, hasta ahora había dudas de si pigmeos como los de las islas Andamán provenían de una migración inicial a la que habrían sucedido otras migraciones. Gracias a las secuencias de ADN obtenidas en este estudio, los investigadores confirmaron que no es así y que el llamado Out of Africa se produjo en una sola migración, de la que descienden todos los humanos modernos.
La teoría de una primera ola migratoria proviene de los naturalistas y los antropólogos del siglo XIX, que vieron que los aborígenes de Andamán y otros grupos étnicos de partes aisladas del sudeste asiático eran similares físicamente a los pigmeos africanos.
De hecho, estas poblaciones se llaman “negritos” porque tienen una estatura corta, pelo negro y muy rizado y piel oscura. El estudio publicado desmiente esta posibilidad: “El genoma de estas poblaciones contiene trozos de ADN del homínido extinto que acabamos de descubrir, pero todos provenimos del mismo Out of Africa”, indicó el investigador.
La estatura pequeña de los andamaneses, pues, no se explica porque los primeros habitantes fueran bajos y por ello su descendencia ahora también lo sea, sino que los científicos han encontrado evidencias genéticas de que este hecho es la consecuencia de un proceso evolutivo de adaptación y de selección natural.
“En una isla pequeña no hay lugar para toda la cadena trófica; por tanto, los grandes depredadores deben desaparecer y los animales de niveles inferiores se hacen pequeños, ya que les da ventajas selectivas”, argumentó.
Este hallazgo también podrían servir para explicar la estatura de los homínidos fósiles de la isla de Flores en Indonesia.