Teóricamente un Tratado de Libre Comercio (TLC) del Ecuador con China podría beneficiarnos porque exportaríamos más de lo mismo y algunos productos nuevos. Negociar un TLC con un país altamente competitivo a nivel mundial constituye un reto gigantesco para los empresarios ecuatorianos que tendrían un mercado de 600 millones de consumidores que es el tamaño de la clase media en China y, al mismo tiempo, competir en el mercado ecuatoriano con las importaciones provenientes de China.
En la práctica, para vender en el mercado chino deberán competir con producción es de alta tecnología e innovación y subsidiada con mano de obra barata. De otro lado los productos chinos recibirán una rebaja paulatina de aranceles ecuatorianos que, a su vez afectará al ingreso fiscal, que tendrá que ver cómo compensar este sacrificio para no afectar a las inversiones sociales. Además podría afectarse gradualmente el sector manufacturero y disminuir su producción y empleo, pero podría compensarse si los productores ecuatorianos hacen lo necesario para lograr una compensación mediante la generación de exportaciones crecientes del Ecuador, tanto en lo que ya vende como minerales, camarones, banano, flores, atún, como en otros alimentos frescos y conservados.
Sería importante si la apertura china a productos hechos en el Ecuador es tan efectiva como factor de atracción de inversiones del exterior para aprovechar este creciente mercado y aumentar la producción y el empleo, para lo cual se deben tener en cuenta las asimetrías entre China y el Ecuador por el tamaño y diversificación de sus economías, que en la práctica deben reflejarse en las listas y en las condiciones respecto del alcance de los productos negociados en valores y plazos, tanto de ida como de vuelta.
En todo caso, un aspecto positivo es que esta negociación blindaría jurídicamente a nuestras exportaciones actuales de productos primarios y a las futuras que se desarrollarían, si los empresarios ecuatorianos logran aumentar su productividad, que constituye en la práctica un gran desafío para un buen futuro de todos.