La reciente designación de Jhonatan Narváez como el representante de Ecuador para los Juegos Olímpicos de París 2024, en ciclismo de ruta, ha generado un debate intenso y polarizador en el país.
Narváez obtuvo el único cupo disponible. Superó al actual campeón olímpico, Richard Carapaz, en una contienda que dejó al descubierto tensiones y cuestionamientos en torno al proceso de selección de la Federación Ecuatoriana de Ciclismo (FEC).
El reglamento de selección, difundido en marzo de este año, especificaba tres criterios fundamentales: los puntos del ranking mundial obtenidos del 1 de enero al 21 de mayo de 2024; los puntos logrados en carreras de un día en el mismo periodo, y la decisión del Directorio de la FEC, compuesto por 13 miembros.
Es momento de dejar de lado las divisiones y enfocarnos en brindar el apoyo necesario a nuestros atletas, quienes nos representarán ante los mejores del mundo.
Carapaz cuestionó que el anuncio a destiempo perjudicó su capacidad de ajustar el calendario de competencias para acumular los puntos necesarios, lo que desató una controversia sobre la equidad y la transparencia del proceso.
‘Richie’, ganador de la medalla de oro en los Juegos Olímpicos Tokio 2020+1, expresó su descontento y señaló que se sentía con el derecho de defender su título en París.
La relación tensa entre Carapaz y la directiva de la FEC, encabezada por Santiago Rosero, ha avivado las especulaciones de que la decisión pudo haber sido influenciada por factores extradeportivos, algo que no debería ser el caso en un deporte que depende tanto del mérito individual.
A pesar de la controversia, es esencial reconocer que Jhonatan Narváez ha demostrado ser un ciclista de élite, ganándose su lugar con esfuerzo y dedicación.
Es, al día de hoy, el ciclista ecuatoriano mejor ubicado en el escalafón mundial. Además, según varios expertos, el recorrido de París 2024 es más favorable para sus características que para otros pedalistas tricolores.
Es lamentable que el campeón olímpico no pueda defender su título, pero Ecuador tenía solo una plaza y Narváez fue el seleccionado por la FEC. Se debe aclarar que en el ciclismo se asigna el cupo al país, no a un deportista en particular, ni siquiera si es el campeón olímpico.
Finalmente, en un gesto noble, Carapaz felicitó a Narváez por su selección.
Ahora, es vital que los ecuatorianos nos unamos para apoyar a Jhonatan Narváez y a todos nuestros deportistas clasificados.
También a Richard Carapaz que tiene por delante otros grandes retos, incluido el Tour de Francia desde el 29 de junio.
En París 2024, Narváez llevará sobre sus hombros no solo la bandera de Ecuador, sino también las esperanzas y el orgullo de un país entero.
Es momento de dejar de lado las divisiones y enfocarnos en brindar el apoyo necesario a nuestros atletas, quienes nos representarán ante los mejores del mundo.
Al final de cuentas, todos ellos son nuestros campeones y merecen nuestro respaldo incondicional.