Dos años de trámite y no hay resultados. Parada en la puerta principal de los Juzgados de la Niñez (norte de Quito), Nelly A. ayer esperaba que el juez finalmente fije la pensión alimenticia para su hijo de 3 años. Media hora después la respuesta fue la misma de los últimos días: vuelva mañana.
Alterada, la mujer recriminó la tardanza: “Soy empleada, gano lo básico y solo en abogados ya he gastado como USD 1 000”.
Pero en los juzgados de la Niñez, los problemas no solo tienen que ver con la demora en los trámites. En una investigación que en ocho meses se desarrolló a escala nacional, y está por publicarse, el Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia (CNNA) determinó que a estas dependencias les falta personal, insumos, papelería, computadoras, teléfonos, etc.
Según esa investigación, la mayoría de juzgados no cuenta con oficinas de apoyo, que hacen informes de la situación social de la familia y cuyos resultados se incluyen en los juicios.
Por ese motivo -según el CNNA- los fallos se prolongan.
“Las condiciones en que trabajan los pocos juzgados de la Niñez son precarias. Preguntamos a los jueces si tienen equipamiento, materiales, etc. y es altísimo el nivel en el que contestaron no”, sostuvo la secretaria ejecutiva del CNNA, Sara Oviedo.
Nelly A. no se separa de la puerta. Toma el teléfono y habla con el abogado. “Doctor, ¿hasta cuándo tengo que esperar? Por favor a usted le he pagado ayúdeme”.
Junto a ella están dos mujeres. Sus historias son similares. Rosaura D. cuenta que su demanda de alimentos está un año en uno de los Juzgados y tampoco le fijan el valor de la pensión.
El juez noveno adjunto, Carlos Arévalo, dice que estos inconvenientes se registran también porque la parte interesada no impulsa los procesos legales. “Lo que se ve es que simplemente no acuden y se estancan, pero no necesariamente es por nosotros”.
Carlos Arroba, asesor legal del Consejo Metropolitano de Protección a la Niñez y Adolescencia (Compina) manifiesta que un juicio de alimentos toma hasta nueve meses o un año, cuando “debería evacuarse en tres meses”.
Desde el 2008, este organismo sigue el caso de ocho niñas, cuya defensa inició acciones legales en contra de un profesor. A él se lo acusa de un presunto atentando al pudor. Luego de tres años, solo dos de las ocho causas llegaron a juicio. Pero este año, el acusado quedó absuelto de culpa. El resto de procesos está en indagación.
Arroba indica que en el fallo definitivo el Tribunal determinó que no hubo pruebas para acusar. “No se recibieron los testimonios de otras niñas abusadas. En los tribunales se dijo que al tener causas iniciadas en contra del profesor había interés de por medio”.
De allí que la secretaria ejecutiva del Compina, Silvia Proaño, pone reparos en el tratamiento de casos. “Tenemos problemas en los juzgados de lo Penal, donde se ventilan las causas de abuso sexual. Además de la demora, de la complejidad, de los tiempos… también es un sistema bastante maltratante. A la larga no se protegen los derechos (de la niñez)”.
No obstante, Proaño recalca que es importante la creación de nuevos juzgados. Un informe del Consejo de la Judicatura señala que entre el 2010 y este año entraron a operar 16 juzgados de la Niñez entre principales y adjuntos. Según la presidenta de la Asociación de Madres Progresistas, Wendy Ayala, el “nuevo sistema ha mejorado mucho”.
Datos del CNNA revelan que hasta el 2009 estaban represados 120 000 juicios relacionados a la niñez a escala nacional. La Secretaria Ejecutiva de este organismo dice que estas cifras “han cambiado un poco a la fecha, porque con la tabla de alimentos se aceleraron ciertos procesos”.
Pero Herlinda H. cuenta que no la ayudaron en los juzgados. Hace un mes su esposo se llevó a sus dos hijos y hasta ayer no sabía nada de ellos. “Al inicio sí sabía dónde estaban. Vine acá y me dijeron que no pueden ayudarme. Desde allí he perdido todo contacto”. La mujer llora, al igual que Nelly A.
Las dos esperaban en la mañana que los jueces respondan a sus problemas, pero hasta el mediodía, cuando se cerraron las puertas, seguían sin saber qué hacer.
Las audiencias
Los abogados que llevan las causas en las oficinas de la Niñez dicen que las audiencias para pensiones se fijan para siete u ocho meses luego de la presentación oficial.
La jueza séptima de la Niñez, Gladys Palma, señala que en su caso aún tiene espacio para que las diligencias se desarrollen este mes.
Los juzgados Primero, Segundo y Tercero funcionan en el edificio del Palacio de Justicia (Piedrahíta y 6 de Diciembre, norte de Quito).
Los juzgados del Sexto hasta el Décimo Segundo operan en la avenida Amazonas y República (norte).