El nuevo proceso para la adjudicación de la operación del Metro se inició nuevamente con la publicación de los pliegos para los oferentes en la página web de la Empresa Pública Metropolitana Metro de Quito (Epmmq).
Esto se da luego de que las autoridades anunciaran que hubo una inconsistencia durante la etapa de revisión de los elementos contractuales de la oferta presentada por el consorcio colombo-francés Metro de Medellín-Transdev. Se estimaba que la firma operaría el nuevo sistema de transporte capitalino, según lo anunció el alcalde de la ciudad, Santiago Guarderas el pasado 15 de julio.
Efraín Bastidas, gerente del Metro de Quito, explicó el viernes 6 de agosto que el error consiste en que no se incluyó en la oferta del consorcio colombo-francés “los montos atribuibles a la inflación, que siempre deben estar presentes, tal como lo exige la normativa ecuatoriana.”
Este Diario consultó a un grupo de expertos para analizar los motivos de esta inconsistencia en la etapa de adjudicación. Felipe Fiallos, abogado especialista en contratación pública, sostiene que hay dos escenarios.
El primero es que en el pliego para los oferentes que se publicó en la primera etapa no haya constado este requisito. La situación hizo que este aspecto no se tome en cuenta en el momento de la calificación y los técnicos se dieron cuenta después del error.
El segundo es que dicho punto sí estaba incluido en los documentos, pero se pasó por alto al momento de revisar las ofertas y se calificó al que no tenía.
¿Dónde estuvo el error del proceso del Metro?
En cualquiera de los dos escenarios, Fiallos considera que el error es de la Empresa municipal del Metro. La entidad es la encargada de llevar adelante todo el proceso de contratación.
Daniel Gonzáles, otro experto en contratación pública, señala que este error en el proceso es una responsabilidad de la entidad contratante. A su parecer, eso demuestra “que no hubo una buena etapa preparatoria”.
Además, dice que hubo una omisión de los servidores públicos, que seguramente será observada en caso de que la Contraloría General del Estado realice algún tipo de examen. Esto incluso podría causar sanciones administrativas, glosas e incluso podría ser causal de destitución de los funcionarios por la afectación que existe.
Sin embargo, Roberto Custode, gerente de operaciones del Metro de Quito, aseguró que el proceso “no tuvo problemas en cuanto a la verificación de los elementos que se encontraban previstos dentro de los pliegos”.
El error, según el funcionario, se dio por la incorrecta interpretación de la legislación ecuatoriana por el proponente. En una rueda de prensa aclaró que dieron cuenta de esto cuando entraron en la fase de discusión abierta con la empresa que operaría el Metro. “El proceso continúa, nunca se cayó”, sostuvo.
Con ese criterio coincide Álvaro Ramírez, abogado experto en contratación pública. Asegura que el nuevo proceso es igual al anterior y que se trata de un estudio de mercado para contratar una empresa apta para operar el Metro.
El especialista cree que el error de la Epmmq y del Municipio estuvo en anunciar que ya se tenía el ganador sin haber cumplido con el proceso preparatorio previo a iniciar la etapa contractual. Es decir, antes de haber conversado directamente con la empresa.
Eso, dice Ramírez, no implica que el proceso ya haya sido adjudicado de manera formal. Añade que este error da cuenta de que Metro de Quito sí se equivocó en el primer estudio de mercado. Por ello deben cumplir nuevamente el proceso.
Así continuará el proceso del Metro
Bastidas manifestó que se reinicia la etapa preparatoria bajo las mismas condiciones y con los mismos pliegos. También informó que las empresas interesadas podrán presentar sus ofertas hasta el 15 de agosto.
Según la autoridad, la fase de evaluación de las propuestas se mantiene de acuerdo con los tiempos previstos para firmar el contrato de operación en septiembre. Aclaran que el funcionamiento del Metro no se modificaría e iniciaría en diciembre.
Para el abogado especialista en contratación pública, Mauricio Alarcón, este traspié que sufrió el proceso de adjudicación deja ver “un deficiente control de un proceso que es vital en la ciudad”.
Según Alarcón, el hecho de que la Empresa municipal haya efectuado todo el proceso de selección del operador del Metro y una vez que ya realizó el anuncio detectó errores en etapas previas solo “siembra dudas en el proceso en general”.
Por ello considera que es complicado que en el nuevo proceso de adjudicación empresas serias presenten nuevamente sus ofertas para manejar el Metro de la ciudad.
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