Los metros son sistemas de movilidad complejos. No solo requieren millonarias inversiones, también conllevan grandes desafíos para una correcta operación.
El 1 de diciembre de este 2023, la operación comercial del Metro de Quito empezará. Se tiene previsto que para esa fecha los 18 trenes y las estaciones estén listos y habilitados.
Juan Francisco Arias, PDH en ingeniería de transporte, y Cristóbal Buendía, director del Observatorio Ciudadano de Movilidad ayudaron a identificar cuáles son los problemas más recurrentes que tienen los metros de otras ciudades de la región.
Coinciden en que requieren atención por parte de las autoridades para evitar que se presenten en la capital.
No alcanzan el estimado de usuarios
El Metro es un sistema de alta capacidad y por lo tanto requiere un eficiente sistema que alimente a la troncal. Por eso, en el caso de Quito, se planificó una restructuración de la red de superficie para alimentar al sistema.
El planificador urbano Bent Flyvberg hizo un estudio de metros y sistemas de rieles y luego de estudiar 300 casos en el mundo concluyó en que la mayoría de los trenes tienen la mitad de los pasajeros estimados y cuestan un 50% más del valor calculado.
El primer desafío en el caso de Quito, es cómo lograr tener los 400 000 pasajeros que se estimaron en un inicio. Aunque ya se ha advertido que los primeros años se llegará a cerca de 200 000 usuarios.
Los metros no siempre son autosustentables
Los metros son sistemas que generan altos costos para su operación y por el manteamiento no solo de los trenes, también de los sistemas de ventilación, emergencia, comunicación, señalización y del túnel.
El reto está en ver cómo se genera la sostenibilidad financiera del sistema. Se debe recordar que los ingresos dependen de la eficiencia del sistema de alimentación, del manteamiento y operación.
Hay muy pocas líneas en el mundo que son sostenibles. Usualmente, necesitan de subsidios que le permiten pagar los gastos. Por ejemplo, en el Metro de Medellín tuvo grandes problemas económicos y tuvo que poner una sobe tasa a la gasolina para cubrir los costos del sistema.
Los metros pueden ser zonas usadas para suicidios
Uno de los problemas más recurrentes de este tipo de sistemas no tiene que ver con la movilidad, aunque termina afectándola. Las rieles de los metros pueden ser zonas usadas para que la gente cometa suicidios.
El metro de Nueva York es el sistema en el que ocurren más eventos de este tipo al año. Ocurren entre 12 y 15 suicidios por mes. También se han registrado casos frecuentes en Buenos Aires y México.
Cuando ocurre un suceso de este tipo, el sistema se paraliza, lo que afecta la operación de los otros trenes e incide en los tiempos de los viajes.
Pueden ser blancos de atentados
Un atentado, una paralización, o un bloqueo son otros de los problemas que pueden presentarse en los metros. Como son lugares de mucha concentración de personas, pueden ser blancos de ese tipo de amenazas.
A eso se le suma el tema de la inseguridad, ya que al estar bajo tierra, los pasajeros pueden no tener señal en el teléfono celular, lo que los incomunica y los vuelve vulnerables.
Puede haber fallas en los subsistemas.
Los metros son sistemas complejos que al estar bajo tierra necesitan un trabajo coordinado y preciso. No puede haber errores en los sistemas de ventilación, evacuación, emergencia, entre otros.
Por ejemplo, al tener entre seis y 11 vagones, necesitan gran distancia para frenar. Es fundamental que cuenten con un sistema de comunicaciones en perfectas condiciones, de modo que cualquier imprevisto sea detectado de inmediato ys e activen los protocolos respectivos.
El mantenimiento debe ser permanente y continuo. El desafío es mantener todos esos sistemas coordinados y correctamente operativos.
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