A inicios de este año, el Gobierno ecuatoriano estimó que para no tener problemas en su Presupuesto, el precio del barril de petróleo debía estar en el orden de los USD 73,7 todo el año.
A eso se debió sumar unos requerimientos de financiamiento del orden de los USD 4 000 millones para equilibrar el Presupuesto. Esto último se ha financiado con los préstamos que se ha contraído con China, con la Corporación Andina de Fomento (CAF) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Hasta el pasado martes, la situación estaba normalizada, pero con la caída del barril en los mercados internacionales por debajo de los USD 80, las alertas se encendieron en varios frentes.
Según el analista petrolero René Ortiz, esta situación era previsible que ocurriera en algún momento, ya que los precios por sobre los USD 100 eran ficticios.
“Desde hace tres meses señalé que no estaban dadas las condiciones para que el crudo esté por encima de los USD 100. Hoy, las estimaciones hablan de que hasta finales de año el precio fluctuará entre USD 65 y 70. En el Ecuador, eso va a acentuar el problema de déficit. Lamentablemente el Gobierno se gastó todo lo que ganó del excedente y no ahorró. Yo diría que ya estamos en problemas. Y los congresistas no presionan por un ahorro”.
Sin embargo, para el analista Andrés Romo la situación todavía es manejable. “Creo que el problema empezaría a sentirse si el precio fluctúa entre los USD 60 y 65. Porque entonces al Gobierno le costaría más generar recursos vía impuesto o deuda, que compensen esa brecha”.
Además, explica que las autoridades ya comprometieron toda la inversión durante el primer semestre. Es decir, que los fondos ya deben estar en camino de ejecución, por lo que en caso de que la crisis se agrave y el precio baje más, se procederá a recortar ciertas inversiones no prioritarias, como pasó en el 2008.
Para Margarita Andrade, el Gobierno debe garantizar un pago anual de USD 20 000 millones en gasto corriente. Si de ese valor, USD 9 000 millones se cubren con impuestos, queda por financiar USD 10 000 millones.
“Haciendo las corridas estadísticas necesarias, el país podría sostenerse en el orden de los USD 65, siempre y cuando lo compense con más impuestos o deje de hacer obra pública”.
Al respecto, la ministra Coordinadora de la Política Económica, Katiuska King, afirma que “hay un manejo responsable de las finanzas públicas que ha permitido que se haya invertido USD 6 571 millones en el 2010”.
Por su parte, para evitar mayores conflictos en las economías regionales, los ministros de Economía de los países que integran la Unión Suramericana de Nacionales (Unasur) debaten desde hoy, en Buenos Aires, un paquete de medidas para afrontar la crisis internacional.
Entre las medidas figuran la coordinación de los Bancos Centrales sobre sus reservas y el uso de las monedas locales y regionales para efectuar transacciones intrabloque, como ya utilizan Argentina y Brasil.
Además, se impulsará el financiamiento de Unasur con bancos regionales como la CAF y el lanzamiento del Banco del Sur, cuyo funcionamiento fue reclamado ayer por organizaciones sociales y políticas de la región.
Bolsas caen; oro y crudo suben
La Bolsa de Nueva York cedió ayer ante la ola de preocupación por la sustentabilidad de la deuda de los países europeos y volvió a caer luego del rebote que había marcado el martes, mientras en Washington avanzó la conformación del “supercomité” parlamentario que deberá recomendar cómo controlar el déficit.
En Wall Street, el Dow Jones de los principales papeles industriales cayó un 4,62% y el Nasdaq, de los títulos tecnológicos, le hizo compañía con una baja de 4,09%.
De esta manera, las acciones de Bank of America, Citigroup, Goldman Sachs y Morgan Stanley se desplomaron, aportando evidencia de que cuando el mercado estornuda los títulos de los bancos padecen una neumonía.
Por su parte, las bolsas de Europa se contagiaron y también cayeron. Madrid y París encabezaron las pérdidas con el 5,49% y el 5,45%, seguidas por Fráncfort (5,13%). El mercado bursátil de Zúrich perdió 4,12%, el de Ámsterdam 3,41% y Londres 3,95%.
Con los crecientes temores, el oro mantuvo su larguísimo crecimiento y saltó un 2,79% hasta llegar a casi USD 1 800 por onza, mientras que también se registraron alzas en otros “refugios” , como los bonos del Tesoro de EE.UU.
Por su parte, el petróleo trepó, ya que una caída en las existencias en EE.UU. se impuso sobre las preocupaciones por la economía que impactaron en el mercado bursátil. Datos de la Administración de Información de Energía (EIA, por sus siglas en inglés) mostraron que los inventarios de crudo cayeron 5,23 millones de barriles la semana pasada, frente a estimaciones de un aumento. Así, el WTI, referencial para el crudo ecuatoriano, cerró con un alza de 4,53%, a USD 82,89 por barril.