Las expectativas de más intervenciones gubernamentales en Europa y la crisis de la deuda en EE.UU. impulsaron ayer al oro a cerca de USD 1 800 la onza, aunque luego cedió un poco de terreno.
Pese a ello, varias instituciones proyectaron que el precio seguirá en alza hasta fin de año. Commerzbank elevó su pronóstico para los precios del oro, al decir que la condición de refugio seguro del metal precioso mantendrá alta la demanda pese a que los valores alcanzan niveles récord. Los analistas del segundo mayor banco de Alemania preven que a fines del 2012 se negociaría en USD 1 900.
“En vista de los actuales factores, los problemas de deuda en EE.UU. y Europa, una política monetaria aún expansiva en las mayores naciones industrializadas, las presiones inflacionarias en los mercados emergentes y las bajas tasas de interés, es probable que se mantenga la demanda de oro pese a los altos precios”, escribieron los analistas en una nota a clientes.
Por su parte JPMorgan había sido el lunes más optimista sobre el precio futuro del metal. La firma espera que los precios trepen hasta los USD 2 500 la onza a fin de año, por una alta volatilidad tras la rebaja en la calificación de la deuda de EE.UU.