El Fisco necesita cada vez más recursos
Las alertas sobre los problemas que puede generar a la economía el expansivo gasto público no son de última hora. Las voces se han multiplicado en los últimos dos años, pese a que las autoridades minimizan los llamados de atención.
Al iniciar el 2011, la declaratoria de emergencia al sector de Salud dio una nueva campanada: ¿falta de previsión o de dinero?
Según el ministro de Finanzas, Patricio Rivera, no hay nada de qué preocuparse, ya que se trata de una emergencia y ya se está trabajando para conseguir los USD 406 millones para enfrentarla.
Para la ministra coordinadora de la Política Económica, Katiuska King, la emergencia saltó porque aún hay servidores públicos que no dan las alertas a tiempo.
En este escenario, Milton Reyes, catedrático del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), considera que en esta declaratoria de emergencia hay dos detalles “curiosos”. El primero, que las autoridades de Salud no hayan alertado a tiempo sobre el desbordamiento de la demanda.
“Al parecer, lo que se le da al Presidente son píldoras de información. Los ministros le presentan solo las buenas noticias. Entonces, el Presidente no sabe exactamente lo que dice en las cadenas de los sábados. Y en este caso, al desconocerlo, y luego enterarse, se abrió el hueco fiscal”.
El segundo hecho, según Reyes, es lo que se deriva de la emergencia. “El Gobierno defiende a rajatabla que se mantenga el equilibrio fiscal. Y cuando hay un problema, adopta los mismos paquetazos de los regímenes ortodoxos, neoliberales a los cuales critica, en este caso, aumentar impuestos. Pero, también quienes antes aplaudían estas medidas como necesarias, hoy las rechazan”.
Pero, para el director general de la Corporación de Estudios para el Desarrollo (Cordes), Vicente Albornoz, la posible aplicación de la sexta reforma tributaria en cuatro años tiene como única explicación que el Gobierno está sin dinero, producto de un incremento del gasto público.
“Nunca antes un Gobierno ha tenido tanta plata como este. ¡Cómo podría faltar dinero para la salud? Entonces, la razón es que ha crecido el gasto corriente a un nivel absurdo. Y ahora ya ni siquiera es un problema de que hay que pagar deuda. Somos uno de los países menos endeudados del mundo. Qué lindo que el Gobierno gaste más en educación y en salud, pero habría que ver qué resultados está reportando”.
En este sentido, la ministra coordinadora de Desarrollo Social, Jeannette Sánchez, señala que “son inversiones a largo plazo, los resultados no se ven inmediatamente, es una apuesta al futuro”.
Albornoz rebate esta tesis con una frase del economista John M. Keynes, que dice que “en el largo plazo todos estaremos muertos”.
Por su parte, Pablo Lucio Paredes, señala en un análisis que “para un Gobierno que ha tenido enormes ventajas como la dolarización, el apoyo popular, la inexistente oposición, el nulo control (se han hecho contratos de emergencia por aquí y por allá, con fiscalización cero) y recursos nunca antes vistos (petroleros y tributarios) todo esto es muy poco. Tanto aparente esfuerzo, tanto recurso para mediocres resultados”.
De ahí que los pronósticos del año pasado de Jaime Carrera, del Observatorio de la Política Fiscal, tenga visos de efectivizarse. Según el analista, “de continuar el excesivo gasto público, la sostenibilidad fiscal estará en peligro y, como consecuencia, habrá un aumento de la pobreza en el país”.