Desde octubre próximo, el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) verificará si las empresas cumplen con los planes de seguridad industrial y ocupacional.
Su incumplimiento podrá generar sanciones económicas, luego de un proceso de inspección.
El IESS aplicará, desde esa fecha, el Reglamento para el Sistema de Auditoría de Riesgo del Trabajo (SART), vigente desde octubre de 2010.
Sobre el tema fueron capacitados los directivos de 8 200 establecimientos de un total de 45 000, en los últimos nueve meses.
“Las empresas intentan ponerse en orden, preocupadas de algo que lamentablemente no ha sido muy observado, como precautelar la integridad del empleado”, dijo Juan Vélez, director nacional de Riesgos del Trabajo del IESS.
La aportación patronal del sector privado equivale al 11,15%, por trabajador, de los cuales el 0,55% sirve para cubrir el seguro por riesgos de trabajo.
Pero, si luego de la primera auditoría en una empresa se encuentran inconformidades mayores, la aportación para este segmento pasará a 1,55% durante dos años; en casos de inconformidades menores, el aporte será de 1% en un año sobre la nómina.
Sin embargo, Vélez explicó que la sanción no será aplicada de forma inmediata. Los empresarios tendrán seis meses para corregir las debilidades encontradas.
Un completo equipo de alarma y sofocación de incendios es básico en cada establecimiento. La normativa ecuatoriana también exige señalización, entre otros.
En Ecuador se registran hasta 8 000 accidentes de trabajo por año (en 2007 se reportaron 8028). Y en tres años, hasta el 2010, el IESS pagó más de USD 100 millones en indemnizaciones o compensaciones por afectación física en jornadas laborales.
Francisco Alarcón, presidente alterno de la Cámara de Industrias de Guayaquil, dijo que en estos dos meses previos a las auditorías es necesario que las autoridades intensifiquen la información del nuevo reglamento.
Aunque a nivel de gremios ya existen asesorías para actualizar las normativas en seguridad industrial y ocupacional, expresó.