En Azuay, la conectividad está entre regular y mala para este feriado de Navidad. La Molleturo-Naranjal, principal vía que conecta con Guayas sigue cerrada al tránsito vehicular desde hace dos meses, por un derrumbe de proporciones en el kilómetro 49.
En el sitio hay un macrodeslizamiento originado por una falla geológica. Son 250 000 metros cúbicos de tierra y rocas sueltas que se han depositado entre el talud de la montaña y la carretera, y de forma constante sigue cayendo el material.
El fin de semana del 18 de diciembre del 2021, con mingas, los comuneros habilitaron un espacio de la calzada para el paso de vehículos pequeños de las familias de la zona, que necesitan llegar a sus propiedades. Pero no se permite la circulación de otros automotores.
El lunes 20 de diciembre los técnicos de la constructora Sudinco iniciaron las labores de topografía para los trabajos de estabilización que contrató el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) por USD 7,3 millones y un plazo de ocho meses.
Los trabajos incluirán la remoción de escombros, muro de hormigón, cimentación de bermas, barreras dinámicas, mallas de anclaje y cunetas de coronación. Mientras estén listas estas obras los conductores seguirán utilizando como carretera alterna la Azogues- Biblián- Zhud- Cochancay, para llegar a Cuenca o Guayaquil y que demanda una hora más de viaje.
Asimismo, para mejorar la conectividad en esta época comercial y turística, la aerolínea Aeroregional habilitó seis vuelos entre Cuenca y Guayaquil por Navidad (23 de diciembre), Fin de Año (28 de diciembre) y año nuevo (4 de enero del 2022).
Entretanto, las otras seis vías principales que comunican a Azuay con Loja, El Oro, Cañar y Morona Santiago, en el sur del país, también registran problemas menores de derrumbes y desgaste de la carpeta asfáltica, pero están habilitadas a la circulación.
En la Cuenca-Girón-Pasaje se han identificado 13 puntos críticos y al momento se realizan trabajos de mantenimiento desde el kilómetro 14 al 53. Se interviene en el arreglo de baches, cambio de alcantarillas, construcción de muros y drenes.
Por el trabajo de la maquinaria pesada, en algunos puntos el paso es alternado e intermitente. Según Luis Barsallo, subsecretario de la zonal 6 del MTOP, a esta vía no se le ha dado mantenimiento varios años y por eso se evidencia el deterioro de la calzada y taludes.
Finalmente, las vías Gualaceo-Limón, Paute-Guarumales-Méndez y la Sígsig-Chigüinda-Gualaquiza, que comunican con Morona Santiago, tienen problemas de deslizamientos que se activan con las lluvias. Pero las autoridades del MTOP han dicho que durante estos feriados estarán en alerta con maquinaria para intervenir de inmediato, en caso de cualquier emergencia.