El Colegio Balandra-Cruz del Sur cuenta con una aprobación del COE nacional. Foto: Enrique Pesantes / El Comercio
El ministerio de Educación despejó la noche del domingo, a través de un comunicado, las dudas respecto a lo anunciado por el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional el viernes, respecto a que en dos colegios de Guayas se aplicaría un plan piloto de retorno progresivo y voluntario a la modalidad presencial.
Las autoridades educativas precisaron que que las clases continuarán desarrollándose de manera no presencial a escala nacional, tanto en el régimen Costa como en el Sierra-Amazonía. Las actividades en todos los niveles -agrega el comunicado- seguirán efectuándose mediante la fase uno del Plan Educativo Aprendemos Juntos en Casa, como se ha manejado desde el inicio de la emergencia sanitaria por el covid-19.
Por su lado, los dos centros educativos que habían obtenido la anuencia del COE nacional (Alemán Humboldt, de Guayaquil y Samborondón y Balandra-Cruz del Sur, ambién del Puerto Principal) para brindar la opción a los padres de enviar a sus hijos a clases bajo ciertos lineamientos, informaron que esperan la autorización de los COE cantonales para arrancar. Ambos confirmaron que antes de eso no habrá retorno progresivo, pese a tener el permiso de las autoridades nacionales.
El retorno es voluntario, por lo que si las autoridades cantonales autorizan las propuestas los representantes de los alumnos de ambos planteles decidirán si envían o no a sus niños o adolescentes.
La alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri, ya había señalado anteriormente que se clausurará y sancionará al plantel que abra sus puertas.
En la Sierra y Amazonía, el 1 de septiembre empieza el ciclo 2020-2021. Centros particulares de Quito tienen sus planes de retorno progresivo, por lo que deberán presentar su propuesta al COE nacional.
En la Sierra y Amazonía, el 1 de septiembre empieza el ciclo 2020-2021. Centros particulares de Quito están listos para empezar el año escolar de modo virtual, pero varios establecimientos consultados por este Diario han expresado que también tienen sus planes de retorno progresivo a sus instalaciones, con medidas de bioseguridad, para cuando existan condiciones para ponerlos en práctica.
En ese caso, los planteles deberán presentar su propuesta al COE Nacional y cantonal. Si no hay observaciones de las mesas técnicas de salud y educación, se aprobaría la implementación del pilotaje.
‘No es el momento’
Especialistas coinciden en que se trata de una decisión acelerada. En el país no existe una disminución sostenida de los casos, recordó el epidemiólogo Daniel Simancas. “La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que durante al menos tres semanas debería reducir significativamente el número de hospitalizaciones y muertes, con una política incremental de pruebas diagnósticas y con un índice de positividad menor al 10%”.
La apertura de las escuelas -agregó Simancas– podría ocasionar posibles brotes. “No estamos diciendo que no se lo intente sino que no es el momento, porque las unidades médicas están congestionadas y si los niños enferman no hay capacidad para atenderlos”.
La pandemia no está controlada, enfatizó el presidente de la Sociedad Ecuatoriana de Salud Pública, Fernando Sacoto, quien recordó que en países como Alemania y Estados Unidos cerraron las escuelas al poco tiempo del retorno, pese a que se empezó en sitios con baja prevalencia del coronavirus.
Aunque el virus no afecte tanto a los niños, el contacto entre ellos ocasionaría contagios, cuyos efectos graves se verían cuando lleguen a su casa y contagien a adultos mayores o a personas con enfermedades preexistentes.Las instituciones que obtuvieron aprobación del COE, señaló el experto, no representan la generalidad del país. “Cuando se lleve el plan piloto con chicos de menos recursos, el riesgo de contagio se va a multiplicar”.