Kiss se presentará en Quito por primera vez en su historia este domingo 12 de abril en el Centro de Eventos Bicentenario. Foto: Archivo.
La producción del concierto de Kiss debe tener en cuenta detalles que van más allá de la pirotecnia y sonido de alto octanaje. Quienes están en la organización lo saben bien pues ya han recibido el tan esperado ‘rider’ de la banda.
Esta palabra se refiere a los requerimientos de la banda para el camerino y para su traslado en la ciudad. Pues, como era de esperarse, esta banda famosa por su rock and roll y su visión de negocios ha solicitado lo mejor de lo mejor en cada uno de los ítemes de la lista que los productores del evento deberán cumplir al pie de la letra.
En primer lugar, Kiss no quiere que el idioma sea una barrera si de ir a lugares se trata. Por eso han solicitado que los choferes que los trasladen a ellos y a su equipo manejen el idioma de Shakespeare a la perfección. De igual manera, evitarán la fatiga del reconocimiento público en las calles pues sus dos camionetas tendrán vidrios polarizados.
Naturalmente, cuando sea el momento de comer, Kiss tendrá una amplia selección de alimentos entre pastas, proteínas y vegetales. Sin embargo son las particularidades las que denotan los especiales gustos de sus miembros.
Por ejemplo, se ha pedido que los plátanos no tengan manchas, que la mostaza sea Dijon, el agua Perrier, la cerveza Stella Artois, el vino Chardonnay, el Gatorade púrpura o el Red Bull ‘light’. Aparte, teniendo en cuenta las diferentes alergias dentro del grupo (a las nueces, queso, vinagres y mariscos), se deberá etiquetar correctamente las comidas.
Kiss se presentará en Quito por primera vez en su historia este domingo 12 de abril en el Centro de Eventos Bicentenario como parte de la gira que celebra su cuadragésimo aniversario. La organización ha adelantado que ese día interpretarán un repertorio de 18 canciones que incluyen tres solicitudes del público.