Un ejemplar de la rana Pristimantis pichincha, recientemente descubierta y descrita en el Ecuador. Foto: Cortesía/ Ministerio del Ambiente.
El Ministerio del Ambiente del Ecuador (MAE) anunció ayer, 20 de enero de 2016, el descubrimiento de tres nuevas especies de ranas. Los anfibios pertenecen al género Pristimantis: una se encontró en las faldas del volcán Pichincha y otras dos en la Reserva Ecológica Río Zuñag (al oriente del volcán Tungurahua).
Pristimantis pichincha se descubrió gracias a un proyecto de monitoreo en el Distrito Metropolitano de Quito (DMQ). Este fue realizado por la División de Herpetología del Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales del Instituto Nacional de Biodiversidad (INB), desde hace ocho años.
“Esta es la undécima especie que se describe en menos de cinco años dentro del DMQ, lo que hace que esta zona tenga el índice de descripción más alta a nivel país”, exclama Mario Yánez, director del Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales.
Por otro lado, el hallazgo de Pristimantis pinchaque y Pristimantis sacharuna es uno de los resultados de 10 años de investigación y levantamiento de información biológica de la Cuenca Alta del Río Pastaza.
En esta investigación participaron científicos del INB, de la Fundación Ecominga, la Fundación Oscar Efrén Reyes y la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE).
“El efecto final que buscamos con estas investigaciones es que se prioricen áreas claves que todavía no están protegidas, como el corredor biológico Llanganates-Sangay, que provee de agua a la cuenca Amazónica y es un laboratorio natural para la investigación”, dice Yánez.
Las tres nuevas ranas forman parte del género de vertebrados más biodiverso del mundo, con más de 400 especies diferentes. El herpetólogo Santiago Ron explica que aunque estas especies difieran en características particulares todas poseen una función en común: las crías nacen sobre la tierra y no pasan por la fase de renacuajos en su desarrollo.