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Una vez que estalló la paz con el Perú, resignados pero no contentos vino un suspiro de alivio. Nuestras Fuerzas Armadas (FF.AA.) habían cumplido y con dignidad el problema limítrofe paso a ser de responsabilidad de quienes manejaban los hilos de la Diplomacia, cumpliéndose así, en parte, la sentencia de Mons. González Suárez.
El jueves último pasado en la Academia Ecuatoriana de Medicina (AEM) tuvo lugar la inauguración de su Biblioteca. Un paso de madurez a todas luces si, como se ha decidido, en ella se hallará la producción en ciencias y en humanidades de los médicos ecuatorianos que llegaron a ser Académicos de Número o Correspondientes.
¿Será que mi tiempo es de postrimerías? Podría ser. Tanto más que es poco lo que me va quedando en cuanto a certidumbres. La trascendencia que le he concedido a la escritura alfabética, una de aquellas pocas certidumbres, me ha llevado a ensayar y ensayar sobre aquel prodigio tecnológico. Y así, la memoria escrita me resulta el intento más serio que ha hecho el hombre para neutralizar la finitud de la vida.
Médicos de gran prestancia los que en 1887 fundaron la Academia Nacional de Medicina del Perú (ANMP). Llegó a ser una prestigiosa institución tanto que le correspondió organizar el V Congreso Médico Latinoamericano que tuvo lugar en Lima del 9 al 16 de noviembre de 1913.
La nación quiteña fue una realidad mucho antes de que naciera Atahualpa. Son razones de peso las que les han llevado a los historiadores a definir como 'el Quito Propio' al espacio geográfico que va desde Alausí, por el sur, hasta la tierra de los Pastos, por el norte.
Se me ha dado por temblar, con raptos de furia entre temblor y temblor, desde cuando la Asamblea Nacional aprobó el Código Integral Penal y pasó a manos del presidente Correa, quien tendrá la última palabra.
Al muy ilustre educador, finales del siglo XIX, don Domingo F. Sarmiento no se le ocurrió mejor título que "Civilización y barbarie" cuando se le dio por escribir la vida de Juan Facundo Quiroga, caudillo federalista argentino, apodado "el Tigre de los Llanos" por sus hazañas, aquellas que le condujeron a que muriera asesinado. Civilización y barbarie también sería el título de la historia de Iberoamérica desde el encuentro de las Edades, la conformación de las nuevas sociedades hasta nuestros días. El pensamiento lógico -la filosofía y las matemáticas-, tratando de abrirse campo en páramos y selvas recién descubiertas, resulta ser la clave que nos permita comprendernos, llegar a definiciones que a los europeos les demandó milenios y que nosotros pretendemos alcanzarlas en apenas 500 años. Sin quitarle un ápice del mérito que sí tuvo, ensoñaciones las del Che Guevara: pretendió iniciar la 'revolución continental' desde las selvas de Camiri, en donde los desventurados campesinos le oían
Amigo como soy de hallar explicaciones fundamentadas o al menos aproximaciones razonables a hechos históricos que han permanecido ignorados o en la penumbra de lo improbable, voy a tratar sobre lo que ha sido un mito entre nosotros: el tesoro de Atahualpa.
El señor Presidente de la República debió quedarse turulato cuando le sumillaron y se vio obligado a leer in extenso el reportaje de investigación que con el título "Redes delictivas trafican fármacos con talco, tiza o ceras" (EL COMERCIO, 13 de septiembre, 2013). Eso de redes delictivas que ejercen tal actividad los hay en todo el mundo, habrá pensado en un primer momento. Lo que a Correa le dejó patidifuso fue la denuncia de que de los 4 mil medicamentos que circulan en el mercado nacional tan solo 600 fueron controlados por el Ministerio de Salud Pública. De acuerdo a los reglamentos pertinentes todas las medicinas que se producen o ingresan al país están sujetas a Registro Sanitario (RS). Es decir, a la identificación de cada uno de ellos en cuanto a su composición y fecha de expiración, entre los datos más importantes. Una vez que desde cuando se obtiene el RS en adelante pueden suceder muchas cosas se establece que las autoridades sanitarias realicen controles periódicos posregis
Para este artículo he debido sacar fuerzas de lo que sobre divagar dice el Diccionario de la Real Academia en su primera acepción: "Hablar o escribir sin concierto ni propósito fijo y determinado". Al avisado lector de este artículo no se le escapará que con la nueva Ley de Comunicación uno tiene que andarse con cuidado, no sea que produzca linchamiento mediático. Sobre divagar nada dice el mencionado texto legal. Desde luego que uno nunca está cubierto de las interpretaciones sesgadas de quienes le leen y no pueden concebir que "lo más importante que hacemos los hombres es ensayar y ensayar" (G. Marañón).
Este artículo va dirigido a los jóvenes que se han constituido en los soldaditos ecuatorianos en defensa del Yasuní: el precioso espacio del territorio nacional, con la mayor biodiversidad del mundo, en peligro real de desaparecer.
Ni cabría que tan solo unos cuantos grupos de jóvenes ambientalistas se pronuncien sobre el inicio de la destrucción del Yasuní, portento de la naturaleza ubicada en el espacio geográfico ecuatoriano, el que nos ha quedado. Hemos llegado al punto de que se hace imperiosa una movilización en defensa de aquel patrimonio nacional, protegido e intocable como así ha sido definido. Las universidades y politécnicas deben pronunciarse. Los movimientos sociales deben pronunciarse. Las Fuerzas Armadas deben pronunciarse. Las sociedades científicas y los gremios deben pronunciarse. La destrucción del Yasuní no es un problema político. Sin exageración alguna, al menos para mí es como si se pretendiera arrebatarnos de un pedazo del territorio nacional, del pequeño que nos queda.
La reelección de Nebot está por verse. La del presidente Correa espera un sí y se prenden los motores de la trituradora legislativa. Hasta donde pueden llegar los cálculos, Correa habría gobernado 15 años. ¿Inestable e ingobernable nuestro país? Desde luego que a Bucaram, Gutiérrez y Mahuad no quedaba más que mandarles a sus casas.
Su vocación misionera debió llevarle a Jorge Mario al sacerdocio. Dados los antecedentes históricos, la Compañía de Jesús era una opción. A poco de fundada, se les vio a los jesuitas dirigirse en plan misionero por el Occidente hasta allende los mares. Así llegaron a América, de ahí a Filipinas, Japón y el resto de Asia. Infatigables, con una determinación tal como que lograron llevar el mensaje de Jesús en el idioma de los nativos.
Se sabe que uno de los santos laicos de mi devoción es el Gral. Eloy Alfaro. Me viene de familia: de entre los míos, numerosos los que abrazaron el Liberalismo Radical de don Eloy, los 'pupos rojos' carchenses, aquellos que en las luchas libertarias ante el enemigo parecía como que no tuvieran miedo. A los 16 años, mis propios pasos me llevaron a matricularme en el Colegio Mejía, laico por antonomasia. En adelante, librepensador, devoto de la Dolorosa del Colegio, defensor a ultranza de la libertad de expresión.
Como entre nosotros es sabido que no abundan los lectores de obras literarias en cualquiera de sus géneros, las librerías de Quito son en extremo limitadas si se las compara tan solo con las de Bogotá y, para colmo, no contamos con críticos de buen nivel que orienten nuestras lecturas, el resultado suele ser la soledad mediocre que se la siente en los hombros caídos de los lectores quiteños. Como antídoto, a un grupo de médicos se nos dio por crear una tertulia de lectores que ha venido funcionando sin interrupciones a partir de enero de 2008, en reuniones por lo general mensuales. No siempre asisten todos, las más de las veces por hallarse fuera del país cumpliendo actividades profesionales. Eso sí, retornan con libros bien recomendados, de gran crítica, ineludibles en un foro que ha ido adquiriendo rigores y exigencias. Tales novedades contribuyen a situarnos con familiaridad en la aldea global, concepto que bien le corresponde al mundo de las letras al momento presente.
Ayer, 5 de junio, tuvo lugar en Lima el homenaje al Dr. Roger Guerra-García, con motivo de haber cumplido 80 años de vida. El acto organizado por la Universidad Peruana Cayetano Heredia y la Academia Nacional de Ciencias, fue el reconocimiento a la obra del ilustre médico en el campo de la investigación científica de la Altura, la docencia, la gestión universitaria, como político y promotor del desarrollo científico del Perú. Participé en tal homenaje. Mis vínculos con Roger Guerra-García se inician cuando mi amigo nace en Cajamarca y yo en Ambato, ciudades altoandinas. Cosmovisiones compartidas: geografías espléndidas que van desde la tierra de los Pastos por el norte hasta el río Maule y la quebrada de Humahuaca por el sur. Por esos inmensos espacios hemos trajinado Roger y yo en citas científicas, en las que nos descubríamos y entendíamos, que tuvieron lugar en Quito, Cusco, La Paz, Lima, Pasto, Arica, Chiclayo, Cajamarca.
Tengo derecho a percibir los acontecimientos políticos que me rodean de acuerdo con mis propios criterios. La libertad de expresión que me asigno responde a tal convencimiento. Respetable, creo yo, y más si en lo personal no obtengo provecho alguno como no ser que por ahí alguno de mis lectores se halle de acuerdo con lo que pienso y expongo.
Se tiene por indiscutible y se ha repetido mil veces que al Ministerio de Salud Pública (MSP) le corresponde prevenir las enfermedades que afectan a amplios sectores de la población.
Una catástrofe para la izquierda ideológica lo acontecido durante el VIII Congreso del Partido Socialista Frente Amplio que tuvo lugar en Guaranda la semana pasada. Dos facciones que se odian en un Partido Socialista reducido a la mínima expresión. Golpeado por sus coidearios uno de sus líderes más conspicuos el Dr. Enrique Ayala. Ante tales hechos cabe un microensayo como es el que pretendo desarrollar.