Acaba de informar, quien funge actualmente como presidente del Directorio del IESS, según lo publica el Diario El COMERCIO, que: “Hay un acuerdo con Finanzas para establecer con una mediación, el monto a pagar al Seguro Social.”
Parece un cuento de nunca acabar, pero despertamos y cada día siguen apareciendo en las noticias la ocurrencia sistemática de actos ilícitos de políticos, de sus familiares y demás círculo de socios ejecutivos de empresas creadas con la razón social de hacer negocios fraudulentos y en colusión piramidal, estafar a las arcas y presupuestos de diversas entidades estatales como los hospitales públicos y del IESS y por último entre otros los municipios y prefecturas, con sobreprecios burdos en la adquisición de varios ítems de material sanitario y proveedores de papel familiares y testaferros de estos grupos delictivos, y que al parecer tenían tanta confianza en su impunidad que seguían en campaña entregando kits sanitarios y alimenticios sin vergüenza.
Este 5 de junio, se conmemora el CXXV Aniversario de la Revolución Liberal, impulsada entre otras razones por la conmoción y el enardecimiento que se generaron por el triste y bochornoso episodio de la historia nacional conocido como “la venta de la bandera” (denunciado por la prensa de la época) y la presión que ejerció la ciudadanía contra el gobierno del Dr. Luis Cordero, a quien tildaron como responsable de este hecho. A las protestas populares se agregó el inicio de la lucha armada de las montoneras en el litoral. Todo este ambiente causó la renuncia del presidente Cordero por lo que al vicepresidente Vicente Lucio Salazar le fue encargado del poder en abril de 1895, hasta que se llamara a elecciones.
Cada cierto tiempo vuelven los “enloquecidos por el dinero”, frase que acuñó el expresidente Carlos Julio Arosemena en 1961 contra ciertos funcionarios del gobierno del expresidente Velasco Ibarra. Hace 13 años volvieron con fuerza avasalladora con audacia, saltándose como bárbaros todas las leyes prodelincuenciales, aupadas por el expresidente fugitivo Correa.
De cuerpo entero se te vio, Correa, piedra en mano, atacando a tus compatriotas; armado de antorchas de odio se te descubrió incendiando la Contraloría, en la vana pretensión de quemar las evidencias que te acusan; disfrazado con plumas actuaste para destruir los pozos petroleros; matando a viejos honorables árboles bloqueaste las vías que llevan pan y agua para la vida; de foráneos mercenarios te valiste para ensangrentar las protestas; con palos expulsaste de su honrado trabajo a buenos campesinos infundiéndoles temor y prestándoles tu odio; con tu habitual astucia manejaste a tus títeres violentos, sembrando el terror, a fin de tomar el poder y asegurar la impunidad para el saqueo de diez interminables años.
El Ecuador acaba de recibir uno de los impactos anímicos más duros de los que se tenga memoria.
El éxito de una persona o de un político es, muchas veces, consecuencia de factores que no deben soslayarse en los momentos triunfales. Sorprendió a las encuestas la elección del alcalde de Quito, pues el ganador se impuso al candidato que aparecía como amplio favorito. El perdedor era de la línea del gobierno y en su campaña proselitista tuvo el respaldo total del presidente en funciones.
El narcotráfico está instalado en todo el país y la narcoguerrilla en la frontera norte, con colaboradores, informantes y, de seguro, con grupos armados ocultos en la selva. El Ecuador está amenazado por la violencia extrema. Se requiere actuar de urgencia, pero sin precipitaciones que causen víctimas, y disponer de un plan que: -cuente con una eficaz inteligencia; -imparta correctas medidas de control de la población y sus recursos; -procure el apoyo de la gente ; -disponga de fuerzas bien preparadas para este tipo de combate; tenga un eficiente sistema de operaciones sicológicas.
Realidad innegable: la ciudad fue, y es aún, el más importante referente de la vida moderna. El Occidente nació en la ciudad, el Estado es hijo de la ciudad. En ella se concentran millones de personas, y están, la prosperidad y la miseria, la ilusión y la esperanza. Están las posibilidades y las frustraciones, los museos y los basureros, y está la contaminación y la violencia.
fcorral@elcomercio.org El ritmo del mundo nos está haciendo extremadamente coyunturales. El proyecto de vida se reduce a la agenda de cada día. El horizonte se agota, en el mejor de los casos, en la semana. Más allá, está la niebla de la incertidumbre. Vivimos al ritmo de los acontecimientos y al paso que marcan las urgencias por cerrar la semana, concluir las tareas inmediatas…y ver la televisión.
La Ley de Hidrocarburos de México estipula que las asignaciones petroleras deben incluir una evaluación de impacto social, pero esta no se ha efectuado para los campos recibidos por la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) ni para las empresas ganadoras de contratos licitados bajo el nuevo esquema de apertura petrolera.
Todavía falta entera la ronda de revanchas de la segunda fase, pero hay razones para prever que Deportivo Quito marcha 'victorioso' hacia la Serie B, algo que no había experimentado desde 1979.
Equidad, entre otros significados es moderación en el precio de las cosas, o en las condiciones de los contratos.
No sorprende que la restricción a la participación social y ciudadana conste dentro de la agenda del oficialismo. Todo lo que huela a diverso y heterogéneo es incompatible con un proyecto político vertical y centralista. La intención de ponerle cortapisas a uno de los elementos más democráticos de la Constitución de 2008 va a contracorriente del espíritu de las luchas populares de las últimas décadas.