Una interminable y caudalosa cascada de actos reñidos con la ética y la ley son las características que recibimos como legado del prolongado, insaciable y voraz gobierno de la RC5. Tan abultadas y burdas han sido las acciones invasoras que, cuál magma imparable, ha contaminado todas las estructuras sociales: de control, judiciales, administrativas, policiales, militares que, bajo la égida del soborno y de la compra de conciencias, repletaron una gran caverna, aparentemente inexpugnable, pero lábil y vulnerable al tesón y a la valentía de investigadores incansables como Fernando Villavicencio y la extraordinaria Fiscal General Diana Salazar. La Corte de Miami se ha sumado a esta cruzada en contra de algunos de los delincuentes ecuatorianos, ilegalmente enriquecidos, con miles de millones de dólares arrebatados a un país víctima de la pobreza, de la narco política, del crimen organizado, carente de trabajo y de inversión extranjera, atormentado por la acción depredadora de gente liderada por el expresidente prófugo, por la expresidente de la Asamblea y por otros personajes que, en evidente traición a la patria, piden a gritos su destrucción.
El pueblo ha madurado y ha desentrañado la esencia torcida de ese movimiento político, que alberga a capos de la droga, a gente inculta, sin valores morales, a exfuncionarios glosados con millonarias sumas y que son incapaces de ocultar su inmundicia; peor aún, derrotados, como han sido en la última consulta, se vanaglorian de haberse opuesto al trabajo por horas y al arbitraje internacional, en desmedro de la inversión extranjera; son tan inconscientes que no desean entender que el trabajo por horas iba a beneficiar a jóvenes estudiantes, a madres solteras, a personas que deben cuidar a familiares enfermos o discapacitados, en lugar de incrementar el conglomerado de desocupados que se ve obligado a hacer trabajos informales o a correr los riesgos de atravesar, a veces solos, a veces con familiares y niños, selvas inhóspitas, o sucumbir como víctimas de tramitadores “coyotes”, o ser detenidos por la guardia fronteriza; eso no interesa ni a los prófugos, ni al líder de la CONAIE, para ellos la meta es perjudicar al país y lo consiguen al oponerse al arbitraje internacional, con lo que impiden la llegada de inversión extranjera y ahondan la maltrecha economía nacional. Su maldad no les permite recordar que la inseguridad jurídica, por el irrespeto a normas contractuales, la originaron ellos al romper, unilateralmente y con absurda prepotencia, contratos con empresas petroleras. Tampoco tienen la capacidad de entender que esos sucesos nos alejan del concierto internacional y nos mantiene como uno de los pocos países que, por inconfiable, carece de la visa Schengen. Incoherentes, como son, aparentan no aceptar que la mayoría ciudadana dijo SI, a la extradición de delincuentes, para que paguen sus penas en EE. UU., a la extinción del dominio de sus bienes mal habidos, que deben pasar al Estado, a la necesidad de exigir que los privados de libertad cumplan toda la condena, sin acortamientos injustificados ¿No entienden que la decisión popular, en la consulta, va dedicada a ustedes, los CR 5, y a su amplia gama de malhechores?
Ya no se burlen del Ecuador, no son perseguidos políticos, son delincuentes; por eso el expresidente Glas no podía recibir refugio en ninguna embajada y peor aún asilo en el hermoso México que se ha transformado, muy penosamente, en guarida de ladrones. El pueblo ha iniciado su recuperación, adelante, ¡no desmayemos!!!