La malformación congénita provoca que los niños no logren escuchar. El aparato cuesta USD 5 000, pero se entrega gratis.
Sin que el hijo de la quiteña Carolina Casagallo haya nacido aún, ya fue sometido a una cirugía. El objetivo fue corregir una malformación congénita, llamada espina bífida. El nombre científico de la afección al sistema nervioso central es mielomeningocele. Fue detectada en una ecografía, cerca del quinto mes de embarazo.