En medio de cucuruchos y almas santas, los chefs de 14 restaurantes daban los últimos toques y retoques a cada uno de sus estantes. Eran las 11:00 de ayer, en uno de los jardines interiores del Convento de San Francisco y los invitados empezaron a llegar a la premiación de las mejores fanescas de Quito.
El pasado domingo, 13 de abril, en la plaza de San Francisco se informó que se emprenderá una campaña para recaudar USD 1 millón para recuperar el patrimonio artístico, mobiliario y arquitectónico de la iglesia de San Francisco. A las 10:30 Alcira Sandoval, especialista de Cultura de la Unesco, visitó las instalaciones de Diario EL COMERCIO para conversar sobre esta campaña y la situación del convento.
Que el convento de San Francisco requiere de unos tres millones de dólares para garantizar su conservación y su sustentabilidad fue de esas noticias no tan esperadas tras una celebración de Domingo de Ramos.
El paso del tiempo en la iglesia de San Francisco, en el Centro Histórico, es evidente. En la sacristía, la cervecería artesanal, el altar, las capillas del Altísimo y del Jesús del Gran Poder se observan daños en las estructuras y las obras de arte.
El Domingo de Ramos en San Francisco, en el Centro Histórico, se celebró con un anuncio. Una colecta para recuperar el patrimonio de este templo que data del siglo XVI.
‘Dios te salve María. Llena eres de gracia…” se escuchaba entre los grupos de familias y otros devotos que rezaban en la iglesia de San Francisco. A las 22:14 del jueves, las pesadas puertas de madera del templo se cerraron. En el interior 24 voluntarios del Culto a Jesús del Gran Poder iniciaron su labor. La mayoría llevaba una camiseta púrpura con la imagen del Cristo Nazareno que los identificaba.
A lo largo de 8 km en las calles del Centro Histórico , miles de fieles católicos demostraron su devoción con rezos, ofrendas y actos de penitencia. La procesión Jesús del Gran Poder cumplió ayer 51 años.
El complejo de San Francisco es el más grande del Centro Histórico de Quito. Hay historiadores que lo consideran como la primera maravilla del arte en América del Sur. Sobre 3 000 m2 se levantan tres iglesias, siete claustros y una huerta.
Desde finales de abril, una gigantografía de 21 metros de alto por 25 de ancho reemplaza, con asombrosa fidelidad, la fachada principal de la iglesia de San Francisco, en el Centro Histórico.