Fausto Segovia Baus

Mujeres en las ciencias

Las mujeres han tenido que luchar para ganarse un espacio en las ciencias. La historia de la cultura revela en este ámbito -y en otros- inequidades estructurales y prejuicios -establecidos por la costumbre y regulados por las leyes- que excluyeron a las mujeres de la educación, la ciencia, la literatura y el arte.

La Red de Mujeres Científicas del Ecuador (REMCI) en un documento señala: “Hacer ciencia en el Ecuador es un gran desafío. Y como mujeres, mucho más. Porque ser mujer y científica implica superar obstáculos”. Los principales obstáculos están dados por discriminaciones de diverso tipo -psicológica, moral, legal, laboral, económica y cultural- que han tolerado atavismos no solo en el Ecuador sino en algunas partes del mundo. En el caso de las ciencias, estas actitudes se mantienen porque existe la creencia que “el hombre genera conocimiento, la mujer aprende; por lo tanto, la ciencia no es vista como un espacio de mujeres, sino de hombres”.

“En el Ecuador, solo el 18% de las rectorías de universidades está ocupado por mujeres; la mayoría desempeña cargos subalternos con altos porcentajes de gestión y muy pocos de decisión. Apenas un 30% de los docentes del Sistema de Educación Superior con PhD es mujer, debido a las barreras sistémicas”. La ciencia y la academia son un reflejo de la sociedad y el manejo de poder, según Neil Degrasse Tyson —científico contemporáneo—, quien sostiene que “la ciencia es un espacio dominado por hombres blancos… donde no existe igualdad de oportunidades”.

El informe de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), 2023, va por el mismo camino. “Revela que, a pesar que las mujeres se gradúan más que los hombres en carreras universitarias, en casi todos los países de la región persisten brechas de género para quienes se dedican a la carrera investigadora”.

Estos datos deben servir de fundamento para la construcción de una política pública sobre las mujeres en las ciencias, con el apoyo de la REMCI, la OEI, la sociedad civil y todos los hombres con un propósito: apostar por un mundo más equitativo.