¿Qué hay detrás de un niño o un adolescente sicario? La noche del 4 de junio de 2024, Ángel Menéndez, alias ‘Cara Sucia’, fue abatido en su hogar, en el sector El Bejuco, en Chone. Los criterios sobre la muerte del adolescente de 18 años no se hicieron esperar.
Sin embargo, detrás del joven que asesinó y extorsionó, hay una realidad social que emerge y se aprovecha en las filas de Grupos de Delincuencia Organizada (GDO).
‘Cara Sucia’ empezó su vida delincuencial cuando tenía apenas 13 años. Como él, niños y adolescentes son perfiles atractivos y de fácil acceso para las organizaciones que operan en Ecuador.
En la Región, 2 de cada 3 niños sufren violencia en su hogar como una forma de disciplina. En Ecuador, 1 de cada 2 niños menores de 5 años es maltratado física o psicológicamente.
Menéndez era parte de Los Cornejos y tenía el distintivo de la agrupación tatuado en el pecho. Se convirtió en un sicario temido en Manabí. En el 2022, ya enfrentó un atentado contra su vida, mientras se encontraba en una casa de salud.
¿El pago es el único móvil para niños y adolescentes? Un estudio realizado por Katherine Herrera Aguilar, experta en seguridad, descarta que el dinero sea el eje central de la incorporación de menores en los GDO, al menos, no en principio.
Los motiva el sentido de pertenencia y la atención que, generalmente, no encuentran en los hogares. Claro que el patrón común, sin duda, es la pobreza, así como familias ausentes o, a su vez, inmersas en un círculo de violencia.
Según el estudio, en Ecuador, un menor reclutado por un GDO puede percibir un ‘sueldo’ de entre 2 000 y 4 000 dólares. Las retribuciones aumentan según los delitos. Las provincias más afectadas por esa realidad son Los Ríos, Guayas, Esmeraldas y Manabí.
En el 2023, una encuesta de U-Report Ecuador reveló que 1 012 de 22 674 adolescentes encuestados dijeron conocer personas cercanas reclutadas por grupos delincuenciales.
Unicef da cuenta de que un niño o adolescente que experimenta algún tipo de violencia es más propenso a experimentar otros tipos de este mal a lo largo de su vida o, a su vez, que actúe de manera agresiva en un futuro.
Eso sin omitir que ese panorama afecta el desarrollo del cerebro, repercute en el crecimiento físico, cognitivo, emocional y social.
En Ecuador, en el 2023, se registraron 770 homicidios contra niños y adolescentes. Se evidenció un aumento en asesinatos de menores de entre 0 y 4 años. Lo propio ocurrió con jóvenes de entre 15 y 19 años.