El plazo de 90 días para lograr acuerdos en los diálogos que mantiene el Gobierno con las organizaciones indígenas y sociales está por finalizar. Hay sectores y agrupaciones que ya anuncian o amenazan con una nueva paralización nacional debido a la “falta de resultados”.
Eso genera -otra vez- incertidumbre entre los ciudadanos y empresarios considerando los efectos que hubo en los bolsillos de los ecuatorianos y las actividades productivas por los 18 días, que duró el paro nacional de junio pasado.
El Ministerio de la Producción calculó que las pérdidas sumaron los USD 1 000, que equivalen a USD 55 millones diarios, una cantidad superior a la estimada en octubre de 2019.
En las familias se siente hasta ahora. Los valores de los productos de primera necesidad no bajaron a los niveles anteriores a esa paralización. Es así que la variación de precios acumulada de alimentos hasta el mes pasado alcanzó el 5,85% y para los que no lo son está en 2,30%. Antes del paro de junio, en cambio, se ubicaba en 3,89% y 1,76%, respectivamente.
Hasta mayo pasado, la Canasta Familiar Básica, que contempla 75 productos, costaba USD 735,15 y en agosto llegó a los USD 754,17, de acuerdo con el último informe publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC). Una situación similar ocurrió con la Vital (73 productos), que aumentó de USD 522, 70 a USD 531,97, en los últimos tres meses.
En un reciente informe de la empresa Kantar, que fue realizado a 1 706 hogares de Quito y Guayaquil, se determinó que las familias priorizan sus gastos y reducen la frecuencia en las compras. Al disminuir el consumo se genera una suerte de círculo vicioso, las ventas merman, las empresas o productores reducen sus actividades, la recuperación del empleo tarda y los ingresos familiares se afectan. Además, hay que considerar que Ecuador es un país que no ha podido erradicar la especulación. Durante la medida de hecho de junio pasado, los comerciantes y los intermediarios dijeron que el transporte subió por el cierre de vías. Se terminó la paralización, pero los precios no bajaron.