Plan más pulido para cuidar al dólar y al Central
El jueves, el Presidente remitió a la Asamblea Nacional por tercera vez el proyecto de Protección de la Dolarización, para que sea tramitado como de urgencia económica.
El proyecto no traspasó, en dos anteriores ocasiones, la barrera del Consejo de la Administración de la Legislatura, por problemas de forma y, según comentaron los asambleístas,
hasta por inconstitucionalidades.
La solución -una suerte de mixtura entre salomónica y política- vino luego de reuniones entre comisiones de técnicos del Ejecutivo y del Legislativo. Allí se limaron asperezas.
El proyecto persigue proteger a la dolarización, un esquema que ha brindado estabilidad a la economía nacional desde su instauración, frente a la debacle de otros países donde el cambio monetario ha sumergido a las grandes mayorías en la miseria.
Así mismo, la dolarización ha logrado que la inflación no crezca y así se ha protegido la capacidad adquisitiva de los ecuatorianos, en especial de los menos pudientes.
Además, el proyecto busca proteger al Banco Central, darle una estructura administrativa técnica y capacidad de decisiones, donde la política partidista y los avatares de los ensayos de los gobiernos de turno no lo perforen y peor malbaraten los recursos, como los de la Reserva Monetaria y los depósitos bancarios que pertenecen a todos los ecuatorianos.
Así, la idea de consolidar un Directorio del Banco Central no fue posible, pero se consensuó en la mesa técnica del Ejecutivo y Legislativo desagregar la Junta de Regulación Monetaria y Financiera en dos juntas distintas. Con estos cambios se espera que los votos de las diferentes fuerzas de la Asamblea entren en razón para apoyar reformas indispensables para el país, la sostenibilidad económica y su futuro.
La aprobación de esta Ley determinará que el Fondo Monetario Internacional siga adelante con su programa, tan importante para financiar el déficit fiscal y seguir recibiendo créditos para el desarrollo. Este será un logro crucial en la larga lucha por estabilizar al país, crear empleo y dar seguridad jurídica.