No hay ola que doblegue a Yagual

Henry Yagual, de 33 años, tiene discapacidad intelectual del 69%. En noviembre consiguió el segundo lugar en el Sudamericano de Surf, que se desarrolló en Argentina. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO

Henry Yagual, de 33 años, tiene discapacidad intelectual del 69%. En noviembre consiguió el segundo lugar en el Sudamericano de Surf, que se desarrolló en Argentina. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO

Henry Yagual, de 33 años, tiene discapacidad intelectual del 69%. En noviembre consiguió el segundo lugar en el Sudamericano de Surf, que se desarrolló en Argentina. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO

Desde las 07:00, Henry Yagual recorre los pasillos del hotel Selina, en Montañita. Lleva un trapo en la mano para limpiar el polvo o la arena que encuentre en las sillas, puertas, mesas. Una vez que todo está impecable, se cambia de ropa y busca una tabla para entrar al agua a surfear.

El ‘Chino’, como lo conocen, tiene discapacidad intelectual del 69% pero sus habilidades en este deporte sobrepasan dicha condición. En noviembre del año pasado consiguió una medalla de Plata en el Sudamericano de Surf Adaptado, que se realizó en Argentina.

Lleva esa medalla en su cuello siempre. La hizo parte de su uniforme. Es su principal orgullo. La muestra a sus amigos y a los huéspedes del hotel. Allí trabaja como asistente de limpieza y de recepción, desde mayo del año anterior.

El lugar cuenta con una escuela de surf para los huéspedes y demás interesados, lo que fue aprovechado por el campeón, que empezó a practicar esta disciplina días después de ser contratado. Isidro Villao fue su mentor.

“Comenzó a practicar con niños de cinco y seis años, fue la mejor manera para que tomase confianza. Ahora es más independiente, pero de todas formas estoy pendiente de él por su condición”, señala Villao sobre el progreso del deportista, que con solo seis meses de práctica consiguió su triunfo sudamericano.

Yagual y Villao son buenos amigos, se hacen bromas cada vez que conversan. Viajaron juntos al Sudamericano, lo que los unió más. Para el desplazamiento, sus amigos y compañeros del trabajo realizaron una colecta y rifas, recaudaron USD 600, que sirvieron para pagar la estadía, ya que la Federación Ecuatoriana de Surf costeó los pasajes.

“Me sentí feliz, pero el agua estaba fría”, cuenta el hombre de 33 años, cuando se le consulta sobre su participación en las olas argentinas. Cuando regresó, medalla al cuello, le realizaron un desfile, con un camión de bomberos y una caravana de motos, que paseó por las calles de la comuna.

Caterina Albán, gerente de marketing del hotel Selina, cuenta que el ‘Chino’ es servicial en sus labores, proactivo y muy responsable. Sin embargo, aprovecha que el hotel está junto a la playa para escaparse a surfear cuando está aburrido.

Están acostumbrados a esas “escapadas”, por eso están pendientes de que no entre solo al agua, para evitar inconvenientes, debido la fuerza de las olas en esta localidad. “Siempre se está riendo, y eso genera un buen ambiente con sus compañeros y los huéspedes”, señala Albán.

Debido a su discapacidad, Yagual tiene dificultades para expresarse verbalmente y trata de que se le entienda mediante señas y gestos. Pese a eso, Albán lo califica como uno de los empleados más carismáticos de la cadena hotelera.

El deportista es el tercero de cinco hermanos, es nativo de la comuna y vive con sus padres, a la vuelta del hotel. Mercedes Amores, madre del surfista, cuenta entre risas que en ocasiones su hijo los asusta porque se demora al regresar a la casa. “Se queda con los amigos”, señala.

Lloró cuando su hijo partió a Argentina, fue la primera vez que se alejó de su casa y le preocupaba su retorno. Lo describe como un hombre cariñoso y dedicado a su familia. Mercedes reconoce que criarlo fue complicado, debido a los escasos recursos económicos con los que contaban.

“Para nosotros fue una sorpresa, cuando llegó porque no sabíamos que había ganado una medalla. La caravana me hizo sentir orgullosa, porque esas cosas no se hacen aquí”, recuerda emocionada la madre del deportista.

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