Luis David Adame cortó dos orejas y salió a hombros
El ecuatoriano Álvaro Samper toreó por derecha con gran acierto. Perdió los premios, porque falló con el acero. Foto: Glenda Giacometti / EL COMERCIO
El Matador de toros mexicano Luis David Adame cortó dos orejas y salió a hombros tras la primera corrida de la Feria de Ambato 2019 celebrada el domingo.
Con un sol reverberante y la presencia de público que llenó tres cuartos de la capacidad de la plaza, se lidiaron reses de Mirafuente y Vistahermosa, de muy dispar juego, cuatro y quinto, despedidos con palmas en el arrastre.
El resumen de la corrida se resumen en: David Fandila, ‘El Fandi’, palmas y oreja; Álvaro Samper, oreja y ovación con saludos desde el tercio. Y Luis David Adame, silencio y dos orejas.
Abrió plaza el experimentado David Fandila, con largas cambiadas, verónicas, quites por chicuelinas y zapopinas tras un buen puyazo. Explosivo con banderillas arrancó ovaciones pese a que anduvo algo impreciso. Faena sobre ambas manos por derechazos, naturales, martinetes de adorno y molinetes de rodillas. Estocada trasera y desprendida, palmas.
En el segundo de su lote el granadino fue aplaudido en el saludo a la verónica y en el quite por navarras. Dos puyazos y hasta cuatro pares de banderillas ovacionados.
La faena fue de vibración, por la transmisión y las dificultades de la res, que fue obligada por ‘El Fandi’ a embestir en tablas por los adentros y el pitón derecho. Molinetes que arrancaron ovaciones y nuevos derechazos en los que el toro, al rematar las series, echaba un gañafón arriba y golpeó al diestro.
Mató abriéndose de la suerte y la espada quedó caída. Fuerte petición y oreja celebrada.
Álvaro Samper saludó a la verónica a su primero y quitó por apretadas chicuelinas que entusiasmaron a la parroquia. Una buena labor de muleta de Samper con el noble segundo de la tarde, con derechazos, molinetes y una nueva serie de en redondos – el nombre original del derechazo -; naturales entonados y toreros y nuevos pases por ambos pitones donde destacó el toreo al natural. Y adornos finales antes de dejar tres cuartos de estocada en buen sitio y cortar una merecida oreja.
El torero quiteño recibió con larga cambiada al quinto de la tarde al que regaló suaves verónicas y un buen quite por chicuelinas. Faena firme, torera, templada de Samper por derechazos, hasta en cuatro, series en las que el toro miraba los muslos del diestro. Naturales de gran jerarquía y nuevos derechazos y cuando el premio estaba al llegar, el mal manejo de la espada le privó a Samper de una salida a hombros que sin duda merecía. Aviso. Todo quedó en una gran ovación.
Nuevo en esta plaza era el mexicano Luis David Adame. El ejemplar de más bonitas hechuras fue el de peor juego. A destacar el buen puyazo de Braulio Almeida y en una faena porfiona Adame acabó con tres cuartos de espada trasera, varios descabellos y aviso. Pitos en el arrastre al toro.
El sexto de la tarde salió defendiéndose pero el excelente puyazo de Hernán Tapia lo atemperó. El torero de Aguascalientes se lució en un quite por zapopinas, entre el entusiasmo general, y tras buenos pares de Congacha y Calahorrano el inicio de la faena de muleta fue con vibrantes cambiados por la espalda. Naturales y derechazos que vencían el molesto calamocheo de la res y una faena de conexión con los tendidos, de buen corte del debutante, que volcó el público a su favor.
Pese al bajonazo de efectos fulminantes, la fuerte petición de dos orejas logró los máximos trofeos con lo que el hidrocálido abrió el cerrojo de la puerta grande.
