El Real Madrid denunció hoy “insultos y agresiones” por parte del Barcelona durante el último partido de la Supercopa, añadiendo un escalón más a la escalada de tensión que viven ambos clubes.
Tras la decisión del juez de competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) de abrir una investigación tras lo ocurrido en el partido de vuelta de la Supercopa de España, el conjunto blanco emitió un duro comunicado. “El Real Madrid ha optado desde un primer momento por una línea de prudencia y responsabilidad para no alimentar el clima de tensión”, comenzó.
El club presidido por Florentino Pérez expresó su “sorpresa” por el hecho de que la “investigación de los incidentes sea ordenada cinco días después del partido, y curiosamente escasas horas después de que el presidente del Barcelona la reclamase públicamente a la propia Federación”.
El Real Madrid espera que la investigación “continúe” y sirva de oportunidad “para esclarecer absolutamente todos los hechos ocurridos durante el transcurso del partido e inmediatamente después de su finalización”. Entre ellos citó “las provocaciones, vejaciones, insultos y agresiones que tuvieron que soportar los jugadores, cuerpo técnico y demás miembros del banquillo” del Real Madrid “en el terreno de juego y también en el túnel de vestuarios”. “El Real Madrid seguirá trabajando en defensa de los valores inherentes a la entidad y siempre por la mayor colaboración posible entre todos los clubes e instituciones del mundo del fútbol”, concluyó.
Aquel encuentro, jugado el pasado miércoles, concluyó con triunfo azulgrana por 3-2 y una pelea final entre los banquillos de los dos equipos. Además, dio la vuelta al mundo la imagen de Mourinho metiéndole el dedo en el ojo al ayudante de Josep Guardiola, Tito Vilanova, quien respondió con un golpe en la cabeza al técnico portugués.
Esto es lo que ahora investiga la RFEF, que podría sancionar a Mourinho con entre cuatro y 10 partidos de suspención. El comunicado del Real Madrid llega poco después de que Eladio Paramés, portavoz de Mourinho, sugiriera que los dirigentes blancos no apoyan públicamente a Mourinho.