A simple vista luce serio, pero con el trato esa percepción cambia. Es una persona amable, sencilla y respetuosa. Esas virtudes sirvieron para que el entrenador argentino Luis Soler le entregara la capitanía del Deportivo Cuenca en algunos encuentros.
En la cancha, su polifuncionalidad es un valor adicional que Soler toma en cuenta. Durante este año, en 22 partidos ha jugado en diferentes posiciones: marcador de punta derecho, volante de marca y volante ofensivo.
Soler lo considera el “comodín” del plantel. Él aclara que cuando Andrade va a la banca de suplentes no es porque jugó mal el partido anterior sino por el sistema de juego. También depende del planteamiento del rival. Hoy, Andrade es titular ante El Nacional.
Miguel Bravo, su amigo y compañero de equipo, en tono de broma sostiene que a Omar “solo le falta jugar de arquero”. Y agrega: “Eso habla de su profesionalismo”. El volante quiteño recuerda que se conocieron en la categoría Sub 13 de Liga de Quito.
Según Bravo, Andrade marcaba de 25 a 30 goles por temporada en las divisiones menores del conjunto albo. Su talento goleador lo llevó a la Selección ecuatoriana de fútbol Sub 17 que jugó el Sudamericano en Bolivia.
Ambos han coincidido en la mayoría de equipos nacionales. Se estrenaron profesionalmente con Liga de Quito, jugaron tres años y medio en Espoli, después pasaron al Olmedo y desde el año pasado están en el Cuenca.
En el 2005, Andrade tuvo un debut soñado como futbolista profesional. Jugó junto a su ídolo, Álex Aguinaga y marcó uno de los goles para la victoria de 3-2 ante Espoli. El 2009 se vinculó al Imbabura y Bravo se incorporó al Emelec.
Ese fue el único año que se separaron. La coincidencia de jugar en los mismos clubes forjó una gran amistad. El próximo 22 de diciembre se convertirán en compadres. Bravo será padrino en el bautizo de Gabriel Omar, hijo de Andrade.
La esposa del futbolista ibarreño es Andrea Garzón (25 años), quien comenta que se casaron tras dos años de noviazgo. Lo define como una persona sencilla, hogareña y que aprovecha con la familia el tiempo libre. Ella es ingeniera en Hotelería y Turismo.
Andrade no se considera un ‘trotamundo’ del fútbol. Según su criterio, el cambio de ciudades es parte del fútbol. En el 2003 hizo una pasantía de seis meses en club Tiro Federal de Argentina. Reconoce que no jugó, pero acumuló experiencia.
En ese país extrañaba el locro de papas con cuero que preparaba su madre. Entre sus platos favoritos también están el arroz con camarón y el cebiche. Es amante de las películas de Silvester Stallone.
El ibarreño finalizará su contrato con el ‘Expreso Austral’ en diciembre de este año. Su meta es entrenarse cada día para ser titular en el puesto que el entrenador Soler lo ubique. “Dios decidirá mi futuro futbolístico”, dice convencido el jugador.
Hoja de vida
Omar Andrade
Nació el 16 de junio de 1986 en Pimampiro, Ibarra. Su esposa es Andrea Garzón (foto), con quien procreó a Gabriel Omar, de 1 año ocho meses.
En el 2005 se estrenó en el fútbol profesional con Liga de Quito. Luego jugó en Espoli, Imbabura y Olmedo. El 2011 firmó contrato con Deportivo Cuenca por dos años. Puede jugar como lateral, mediocampista y delantero.