Félix Torres basa su juego en los estilos de Erazo y Fajardo

Félix Torres disputa el balón con Juan Manuel Tévez, durante un partido entre Barcelona y Macará este año. Foto: Archivo/ EL COMERCIO

A los 15 años, Félix Torres quedó deslumbrado con el juego de Frickson Erazo, que se coronó campeón nacional con Barcelona. Cinco años después, el zaguero podrá cumplir uno de sus sueños, que es jugar junto al ‘Elegante’ con la divisa torera.
En esa época, Torres empezaba a despuntar en el fútbol. Militaba en Alianza del Pailón, equipo de su natal San Lorenzo, Esmeraldas, en el que se formó y donde disputaba los campeonatos provinciales de la segunda categoría.
Empezó como volante de marca, pero con los años se acomodó en la posición de defensa central. Cuenta que su juego se vio ampliamente influido por el estilo de Erazo; desde entonces, acostumbra a ‘salir jugando’ y pocas veces rechaza con potencia.
Está ansioso porque se concrete la habilitación de Erazo en Barcelona, para poder compartir el puesto con él. La directiva espera obtener la acreditación esta semana, para que pueda jugar ante Deportivo Cuenca, el domingo.
“Jugar con él será cumplir un sueño. Es de los jugadores que más admiro tanto por su técnica como por su calidad”, dijo el deportista de 21 años, que en esta temporada es el central derecho estelar de los canarios, tras las lesiones de Darío Aimar y Luis Caicedo.
La mejor cualidad de Torres es su velocidad y ubicación, según el DT canario Guillermo Almada. El entrenador Kléber Fajardo cuenta que el deportista siempre tuvo esa característica; fue el técnico nacional quien promovió al zaguero desde los torneos amateur, lo llevó a primera categoría y lo acercó a Barcelona.
En el 2015, ‘El Cabezón’ conoció al futbolista, cuando fue con su equipo Galácticos, de la segunda categoría de Manabí, a jugar un partido amistoso con Alianza del Pailón, de San Lorenzo (Esmeraldas). El jugador lo sorprendió de inmediato y trató de llevarlo a Manabí.
“No quería seguir jugando en segunda y no aceptaba ir a Galácticos, cuando llegué a dirigir en Liga de Portoviejo lo volví a llamar y al día siguiente llegó. Es un jugador que conoce sus capacidades y apunta alto”, dijo Fajardo.
Los dos hicieron buena amistad. El técnico se tomaba 15 o 20 minutos al final de las prácticas para pulir el juego del zaguero. Fajardo, que en su etapa de futbolista jugó como volante de marca y defensor, le compartía su experiencia.
“Llevé a Torres a Emelec para que lo conocieran, pero no me prestaron atención; luego busqué a Jimmy Montanero, que se interesó en el muchacho, tiempo después Barcelona lo fichó”, contó Fajardo.
Él recuerda a Torres como un joven serio, introvertido y respetuoso. Ese mismo perfil lo mantiene en las prácticas canarias, donde rara vez se lo ve haciendo bromas a sus compañeros; está siempre concentrado, atento a las órdenes del técnico Almada.
El año pasado, los amarillos compraron el pase del jugador, que en principio había llegado a préstamo por un año. En noviembre se confirmó que Torres pertenecía al club, con un contrato por cuatro temporadas.