Álvaro Guillén, de 14 años, se entrena las canchas del Anexo del Guayaquil Tenis Club, en la vía a Samborondón. Foto: Joffre Flores / El Comercio
Probar la comida francesa fue una mala experiencia para el tenista Álvaro Guillén, que el lunes pasado regresó al país, tras cumplir por Europa con la gira Cosat. El primer país que visitó fue Francia, donde la gastronomía fue su peor rival.
Entre risas, el joven de 14 años cuenta que durante la semana que estuvo en el país galo, la comida fue el principal obstáculo. “El primer día me dieron una papa rara, con tomate como puré, comí poco y el resto de días fue igual”, dijo.
Fue la primera vez que el deportista compitió en el Viejo Continente y -además de la gastronomía- consideró la experiencia como algo enriquecedor para su naciente carrera. Además de Francia, jugó en Alemania, Bélgica, Holanda…
Durante las cinco semanas que estuvo en el Viejo Continente, consiguió títulos en singles y dobles en Alemania, otro en parejas en Francia y Bélgica. También, logró dos vicecampeonatos, uno en Bélgica y otro en Francia.
En los tres primeros torneos hizo pareja con el peruano Rodrigo Montesdeoca; para las pruebas siguientes se complementó con el venezolano Francisco Lamas. Con ambos desarrolló una buena amistad y continúa en contacto por las redes sociales.
Guillén compitió en Europa, tras lograr un cupo en la gira Cosat sudamericana, que se jugó a inicios de año. “Competir al ritmo de Europa es complicado, los chicos están al más alto nivel. Es duro, te presionan al máximo. Regresé más maduro y con más experiencia”, manifestó el tenista antes de comenzar su entrenamiento en el Guayaquil Tenis Club.
El guayaquileño se quedará en el país hasta mediados de septiembre, cuando viajará a España para cumplir con un período de entrenamiento. Allá se preparará en la academia de su tío Víctor Hugo Guillén.
Durante su estancia en España, prevé competir en cinco torneos. Asimismo, en diciembre viajará a Miami, Estados Unidos, para participar en el Orange Bowl.
Gracias a su éxito en la gira europea, el tenista tiene una invitación para unirse a la academia de Rafael Nadal, en Mallorca. Según contó, es probable que este año se dé su vinculación, de no ser así, lo haría el próximo año.
‘Rafa’ es su tenista favorito. Cuenta que lo veía desde niño, cuando empezaba a jugar tenis, incentivado por su abuelo Víctor Hugo. Le gusta la entrega, potencia y técnica del tenista español, que actualmente lidera el ranking ATP.
A diferencia de Nadal, Guillén es derecho, pero al igual que el español, se siente más cómodo jugando en arcilla, dice que quiere igualar el forehand de ‘Rafa’.
Guillén tiene dos entrenadores de lujo. Por las mañanas cumple sus prácticas con Raúl Viver, capitán del equipo de Copa Davis; y en las tardes el ‘Zurdo de Oro’ Andrés Gómez es quien pule su técnica.
“Son dos monstruos, es increíble entrenar con ellos. Siempre me apoyan, me hablan y me cuentan sus anécdotas. También, son muy exigentes”, cuenta el joven deportista.
Viver resalta la capacidad de su pupilo, al que considera uno de los mejores exponentes del deporte en su categoría. “Sé que su meta es ser un gran profesional. Cuando se tiene estos resultados a esa edad, te hace ver que no tienes que ponerle límites”, dijo.
Por otro lado, Gómez admira la actitud del joven. “Competir con los mejores del mundo le hizo ver cómo es el tenis. Hay un cambio sustancial en su forma de pensar respecto a años anteriores, es un ganador.
Guillén está en décimo año básico y estudia a distancia en el Colegio Pert. Esta modalidad le permite cumplir con sus competencias sin dejar de lado su preparación académica.