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El tráfico marítimo creciente puede multiplicar las especies invasoras

Un estudio dice que el tráfico marítimo que crecerá con fuerza hasta el 2050 multiplicará las especies invasoras. Foto: CC0 PUBLIC DOMAIN

El creciente tráfico marítimo mundial podría llevar a un fuerte aumento de las especies invasoras en todo el mundo durante los próximos 30 años.

Los hallazgos de un nuevo estudio, publicados en 'Nature Sustainability', sugieren que el crecimiento del transporte marítimo superará con creces el cambio climático en la propagación de plagas no autóctonas a nuevos entornos en las próximas décadas.

"Se cree que las invasiones biológicas son un importante impulsor del cambio en la biodiversidad y causan miles de millones de dólares en daños económicos anualmente", dice el autor principal Brian Leung, profesor asociado en el Departamento de Biología y Escuela de Medio Ambiente de McGill. "Nuestros modelos muestran que la red de transporte global emergente podría producir un aumento de tres a 20 veces mayor en el riesgo de invasión marina global desde ahora hasta 2050", agrega.

Los barcos representan el 80 por ciento del comercio mundial, y se estima que del 60 por ciento al 90 por ciento de las bio-invasiones marinas. En algunos casos, los barcos transportan organismos vivos a través del agua de lastre, que se toma para estabilizar el barco. En otros, las especies llegan a nuevos entornos al adherirse a los cascos de los barcos.

"Para comprender cómo cambiarán las invasiones biológicas, debemos entender cómo podrían cambiar los patrones de transporte", dice el autor principal Anthony Sardain, estudiante graduado en el laboratorio de Leung en McGill. "Nuestro estudio sugiere que, a menos que se tomen las medidas adecuadas, podríamos anticipar un aumento exponencial en estas invasiones, con consecuencias económicas y ecológicas potencialmente enormes", advierte.

Afortunadamente, los costos de las invasiones biológicas se están reconociendo, con importantes iniciativas políticas como la Convención Internacional sobre la Gestión del Agua de Lastre recientemente implementada, señalan los investigadores. La Convención, que entró en vigor en 2017, representa el último esfuerzo mundial para controlar las bioinvasiones a través de medidas como el intercambio de lastres, un método que ha sido eficaz para reducir las tasas de invasión en los Grandes Lagos de América del Norte. "Aunque es demasiado pronto para evaluar la eficacia de la Convención a nivel mundial, nuestro trabajo sugiere que está en la dirección correcta", dice Leung.

Para proyectar las tasas de crecimiento del tráfico marítimo mundial y las consecuencias de las invasiones biológicas, los investigadores crearon modelos informáticos utilizando escenarios de crecimiento socioeconómico desarrollados como parte del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas. A medida que aumenta la riqueza y la población, también lo hace la demanda de bienes y servicios que no están disponibles localmente.

La amplia gama de incrementos en el riesgo de bioinvasión estimada por los modelos, entre tres y 20 veces, se debió a la incertidumbre en las trayectorias socioeconómicas subyacentes. "A pesar de este amplio rango, todos los escenarios apuntan a un aumento tanto en el transporte como en las invasiones --señala Sardain--. Eso debería alertarnos sobre la gravedad de la situación y la importancia de las medidas para reducir las invasiones biológicas".