La anorexia y la bulimia son los trastornos de alimentación más comunes. A ellos se les han sumado otros como la ortorexia, la pregorexia y más. Foto: Captura.
Ya no son solo la bulimia y la anorexia nerviosa los trastornos que amenazan con causar daños físicos y psicológicos, sobre todo, entre los adolescentes. Ahora -y por causa de la desinformación, estereotipos y baja autoestima– muchas personas son víctimas también de trastornos como la vigorexia, pregorexia, ortorexia, etc.
De acuerdo con la nutricionista María Soledad de la Torre, un trastorno alimentario implica cambios extremos en la dieta diaria. Según la National Institute of Mental Health, esto puede implicar “como comer cantidades muy pequeñas o en exceso”.
En el caso de la ortorexia, por ejemplo, las personas tienen una obsesión por comer sano y limpio’ dejando de lado alimentos importantes en la dieta diaria.
Para tratar cualquiera de estos trastornos, la psicóloga Fernanda Bermúdez y la nutricionista Jeanette Heredia concuerdan en que se requiere de un equipo multidisciplinario de especialistas (nutricionistas, endocrinólogo, psicólogo, psiquiatra…) para evaluar integralmente a los pacientes. De este modo se llega a determinar cuáles son las causas del trastorno y cómo proceder con su tratamiento.