La Fiscalía del Guayas prosigue con la indagación de un caso de presunta estafa electrónica, denunciado hace cuatro meses por el Consulado de EE.UU. en Guayaquil.
El Cuerpo diplomático estadounidense denunció que desconocidos se habrían tomado el nombre del Consulado para pedir dinero por negociaciones ficticias de bienes inmuebles.
La fiscal que lleva la indagación previa, Patricia Morejón, explicó cómo operaban los estafadores: “si usted pone una vivienda en venta, le llega un correo electrónico a su cuenta (la que puso como contacto en el anuncio de venta del inmueble) que dice que la Misión diplomática está interesada en adquirir ese bien. Para ello se pide que se deposite un dinero a través de Western Union o DHL (servicios de encomiendas) u otro medio”.
Ese dinero debía servir, supuestamente, para reservar una cita con el Cónsul.
Esta mañana debía realizarse en el Juzgado III de Garantías Penales de la Corte de Guayaquil la audiencia de formulación de cargos contra el único acusado, de momento, del ilícito. El sospechoso de la estafa, Jhonny M., guarda prisión en la cárcel de Jipijapa desde diciembre del 2010, acusado junto a otras dos personas de manipulación de sitios web oficiales para ofrecer trabajo a cambio de dinero.
La audiencia se suspendió porque la defensa del acusado no se presentó. Con la fallida audiencia la Fiscal esperaba iniciar la instrucción fiscal.
“Haremos un segundo llamado a audiencia, si no se presenta el abogado del acusado, deberá actuar el defensor público”, dijo Morejón.
Según la Fiscal, cada perjudicado habría entregado hasta USD 200 por el falso negocio. “Hablamos de una cantidad total que superaría los USD 100 000”.