Luego de que la noche del viernes 17 de junio de 2022 el presidente de la República, Guillermo Lasso, declarara el estado de excepción en Pichincha, Cotopaxi e Imbabura, ofrezca medidas que mitiguen la crisis y pida diálogo con todos los sectores, una parte del sector campesino reaccionó. Los dirigentes se negaron a hablar con el Gobierno, un grupo de indígenas de Cotopaxi anunció una marcha a Guayaquil y la alcaldesa Cynthia Viteri se pone en guardia.
Por el lado de los campesinos, el vicepresidente de la Federación de Única de afiliados al Seguro Campesino (Feunassc), Julio Barzola se pronunció. “Estamos cansados del diálogo y las mesas técnicas. ¿Diálogo para qué? Él ya tiene las propuestas del sector, las tienen viceministros y ministros. Acceder serían dos meses más sin solucionar. Lo que queremos son respuestas”, increpó.
El dirigente recuerda que lo planteado es mejorar la carestía, reducir el impacto del alza de combustibles e insumos agrícolas, optimizar y respetar el costo del arroz, y acceso digno a medicina y atención médica. “Lasso no ha cumplido con lo ofrecido. En lugar de pagar deuda externa, debe respaldar nuestras necesidades. Por eso nos mantendremos en las manifestaciones”, insistió.
Algunos gremios tenían previstas manifestaciones en Salitre y al mediodía del lunes en Santa Lucía, adelantó.
La vocera del sector arrocero de Guayas, Alexandra Plúas, también rechaza el diálogo que planteó el Presidente al anunciar el estado de excepción. “Lasso no ha dado respuesta al agro, que se ha declarado en emergencia. Sabemos que en el precio de los fertilizantes incide la guerra, pero hay sectores productivos como el banano y los maiceros que están al borde del colapso”, manifestó.
Señala al Mandatario de no escuchar petitorios, de olvidarlos, y defiende la manifestación como la única forma de resolver problemas. “Hizo caso omiso a nuestros pedidos de diálogo y ahora quiere hablar… Nunca se sienta al diálogo y si lo hace, lo hace con gente equivocada, ¿cómo podemos creerle?”.
Un movimiento conciliador
Tomando distancia de las posturas radicales, el presidente del Movimiento Nacional Campesino, Richard Intriago, dijo el viernes 17 de junio que no aupará ninguna manifestación que venga orquestada por el líder indígena Leonidas Iza, que solo quiere ser presidente y tiene la intención de repetir el paro de octubre.
Dijo sí que este lunes 20 de junio tiene previsto presidir una asamblea con los miembros de la organización, para instar al diálogo, pero “con el mayor respeto” al Presidente, que, dijo, debe reconocer lo que hace falta solucionar.
Para la vocera de los arroceros, Intriago se ha convertido en un alquilado del Gobierno que no representa al sector. “La próxima vez que salga a dar declaraciones que las haga con nombre y apellido de quién lo apoya. Es el típico ‘dirigentillo’ que quiere abarcar todo, que diga a quién representa, pero que no mezcle al pueblo”, criticó.
Guayaquil, en guardia
La alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri, dijo este sábado 18 de junio que el plan de protección de la ciudad sigue activo en su fase 1, con la presencia de volquetas y todo el contingente municipal en 5 sectores de la ciudad, entre esos el acceso al Puente de la Unidad Nacional. “Estos puntos seguirán custodiados mientras persista el paro para actuar en caso de que manifestantes intenten entrar a la ciudad”, manifestó.
Lasso, por su parte, ofreció aumentar el bono de desarrollo a USD 55, declarar en emergencia la salud pública, doblar el presupuesto a la educación, subsidiar la urea, que se usa como fertilizante; condonar créditos hasta de USD 3 000, ceder créditos agrícolas y no alzar el diésel, el gas ni la gasolina extra y ecopaís.