Días nublados y una fuerte sensación de frío en las noches. Con ese clima ha tenido que vivir Quito durante las dos últimas semanas de junio. Esto pese a que el mes en curso es de transición a la época seca.
En lo que va de junio, la cantidad de lluvia ya sobrepasó lo que normalmente se espera durante todo el mes. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) registra que en el norte (Iñaquito), se esperaban 38, 8 milímetros (litros por cada metro cuadrado) pero ya llovió 84, 2. Es decir, un exceso del 117%.
En Tababela se esperaban 19 milímetros y hasta ahora ha llovido 52,2. Mientras que, en el sur, lo normal es 67, 9 milímetros y ya hubo 188. Según Javier Macas, analista del Inamhi, se prevé que hasta finales de mes el exceso se ubique en un 300%, en general.
La estación lluviosa prolongada durante este mes, según Macas, tiene que ver con que los sistemas atmosféricos no están posicionados como regularmente lo hacen. Entonces, sigue prevaleciendo aire y circulación del viento que ingresa desde la parte continental lo que ayuda a que existan precipitaciones intensas.
¿Cómo ha afectado esto a las zonas vulnerables? Según Freddy Yandún, director Metropolitano de Gestión de Riesgos, hay 10 zonas en las que se han concentrado el mayor número de inundaciones, movimientos en masa y colapsos estructurales por las lluvias.
La primera con más emergencias es Conocoto (32 eventos), le siguen Puengasí (23), Itchimbía (16), Centro Histórico (16), Calderón (13), Ferroviaria (12), Chillogallo (12), Amaguala (11), Argelia (11) y La Magdalena (11).
Entre enero y el 17 de junio del 2020, según la Secretaría de Seguridad del Municipio se registraron 256 eventos. En el mismo periodo, pero de este año, ya se han reportado 381 emergencias, según Yandún.
Los datos muestran que la mayor cantidad de ese tipo de alertas se dan en el sur, centro y valles. Calderón es la zona con más problemas en el norte. Yandún dijo que esto tiene que ver con el tipo de suelo arenoso y deleznable que hay en esa parroquia.
Además, en el centro y sur, la cantidad de eventos relacionados con las lluvias tienen que ver con las construcciones a borde de quebrada.
Yandún recordó que en Quito hay 72 zonas propensas a movimientos en masa y 76 a inundaciones. De esos se ha hecho un análisis por parroquias y así se definió a los 10 lugares más afectados.
Desde este año, el Municipio reformó sus planes de atención. Ya no hay una división entre el Plan Fuego y el Plan Lluvias. Los organismos de respuesta están preparados para atender eventos relacionados con las precipitaciones, así como con incendios forestales propios del verano.
Lo que resta del mes, según Macas, aún habrá lluvias. Por ejemplo, el fin de semana se prevé cielos nublados con precipitaciones. Sin embargo, a diferencia de la semana pasada, no se espera que las lluvias lleguen a ser de gran intensidad para considerarlas tormentas.