El mantenimiento de un vehículo se convierte en la principal tarea de un usuario. De eso depende que la vida útil se alargue y no tenga problemas en los recorridos que hace diariamente. Así mismo, protegerá su inversión en el tiempo, ya que cuando desee vender el automotor, recibirá un buen precio.
El cambio de aceite, filtros, baterías, bujías, frenos, entre otros, son necesarios para cuidar el motor y sus piezas. La vida útil de un motor llega hasta los 300 000 km, pero si no recibe un buen mantenimiento no pasará de los 200 000 km.
Por eso es clave la selección de los talleres donde va a realizar el mantenimiento cada 5 000 kilómetros. Más todavía cuando los nuevos modelos llegan con alta tecnología y en versión automáticos, que son monitorizados por computadoras.
Byron Yanes, coordinador de Segmento de Neohyundai, dijo que ahora los motores deben ser cuidados permanentemente con lubricantes y aceites que cumplen ciertas especificaciones de calidad. “Si bien en los talleres independientes es más barato el cambio de aceite y lubricantes, estos no garantizan el cuidado de otras partes y funciones que son necesarios”.
El uso de combustibles y el chequeo de los frenos también son importantes para garantizar la seguridad del conductor. “El mantenimiento en los talleres de los concesionarios no es caro sino costoso. Caro es algo que no garantiza la vida del vehículo y costoso es el dinero que se utiliza para evitar muchos gastos después”, explicó Yanes.
Juan Torres, mecánico independiente, sostiene que los chequeos son iguales en cualquier lado. “Si el cliente quiere un chequeo preventivo se lo hace. Todo depende de su presupuesto”.
Los clientes deben apostar al chequeo preventivo.
Cambio de aceite y filtro
El filtro y el aceite son las piezas claves para mantener limpio el motor y alargar la vida útil del vehículo.
Si es de mala calidad y no cumple ninguna especificación puede afectar al motor y generar problemas que impidan su arranque y movilidad. El filtro ayuda a que el aceite no se contamine y lubrique correctamente el motor.
Los técnicos señalan que cada concesionario tiene su propio lubricante de fábrica para cada modelo y marca, lo que implica que no es conveniente cambiarlo en las revisiones de mantenimiento. Hay diferentes tipos de aceites en el mercado que pueden ser utilizados en camionetas, sedanes, SUV, buses, entre otros. Así también, los filtros vienen en varias presentaciones y características para cada motor.
El cliente debe exigir buena calidad de aceite y filtro.
Es recomendable que el conductor lea el manual del vehículo nuevo.
Ahí se especifica la característica del aceite que se debe usar en cada chequeo. No es recomendable usar uno diferente cada vez.
Cada 5 000 kilómetros se debe realizar el mantenimiento del motor del carro, que incluye el cambio de aceite y filtro.
No es recomendable que se pase de los kilómetros permitidos para el cambio. Eso puede afectar al rendimiento del motor.
Hay aceites que se cotizan en USD 10 y otros hasta en 50. Lo que hay que exigir es calidad y marcas reconocidas en el mercado.
El uso de la gasolina ayuda
En el mercado automotor se comercializan cuatro tipos de combustibles. En la lista están el diésel, la gasolina súper, extra y ecopaís. Según las estadísticas de Petrocomercial, la extra es la de mayor demanda. Lo ideal es utilizar un combustible con un grado de 92 octanos, pero en el mercado local la que se acerca a eso es la súper, con 89, la extra tiene 80.
Los mecánicos explican que para elevar el octanaje se utilizan aditivos pero que no ayudan mucho, ya que solo sube un grado. Por eso recomiendan que los vehículos nuevos utilicen la súper para que no afecte al motor y al arranque.
Otro de los combustibles que se utiliza es ecopaís, que es considerado por los expertos mejor que la gasolina extra, ya que es una combinación con etanol. De ahí que el cliente es el que el debe tomar una decisión.
Cuando el tanque de gasolina de los vehículos llegue a la mitad de la capacidad debe ser llenado a tiempo.
No es recomendable que se termine el combustible para volverlo a llenar. Eso genera problemas en los inyectores y filtros de gasolina que son importantes.
Los clientes deben seleccionar al mejor distribuidor de combustible que garantice calidad en los despachos.
La mezcla de gasolina súper y extra no ayudará a mejorar el octanaje. Es mejor usar una variedad de combustible en el mercado.
Si va a escoger un aditivo primero debe consultar a los técnicos para que le informen la marca.
El funcionamiento del motor
El inyector, el cambio de aceite, el alternador, las bujías y la batería son las piezas que ayudan a cuidar el motor de los vehículos. Si una de ellas no se cambia adecuadamente y en el momento preciso puede alterar el funcionamiento de la máquina.
Si bien esos defectos no se ven inmediatamente y no generan problemas pero en el mediano y largo plazos las cosas cambian. El motor comienza a tener defectos y la potencia del auto empieza a descender.
Ahora los talleres concesionarios utilizan una computadora para determinar las fallas y debilidades que tienen los equipos del motor. La tecnología permite detectar si una pieza no fue revisada o reemplazada en el chequeo. En cambio en los carros usados la revisión es diferente. Ahí se realizan cambios y pruebas manualmente.
La potencia del motor depende del modelo del vehículo y si es más fuerte requiere mayor cuidado y prevención.
El mantenimiento eléctrico es clave para que el alternador le dé fuerza al motor y evite que se apague.
El cambio de bujías que dan energía al motor deben cambiarse cada 40 000 km.
La limpieza del inyector es recomendable cada 20 000 km. Eso ayuda a evitar que el combustible se ensucie.
El motor de los vehículos automáticos es más delicado que los mecánicos.
El cliente debe informarse en el manual sobre los cuidados del motor.
El chequeo de la batería
Con la nueva tecnología las baterías ahora son controladas permanentemente y se puede alargar su vida útil. Ahora se utilizan equipos que registran el porcentaje de uso que tiene la batería y con eso se facilita el control eléctrico.
Con estos equipos se pueden evitar problemas eléctricos y de arranque. Así mismo, evitar daños al motor. Esta parte del automóvil es muy importante y debe dársele mantenimiento al menos cada 5 000 km. La revisión la puede realizar el conductor o la concesionaria. Eso incluye agua, bordes seguros, vibración, temperatura y otras partes. Si alguna vez se descarga la batería, no debe pensar que se recargará solo manejando.
El alternador no está diseñado para hacer una carga completa de la batería muerta. Debe ser revisada o cargada por un profesional. O adquirir otra.
Para ahorrar energía de la batería se deben desconectar el radio y accesorios eléctricos cuando el vehículo no esté prendido.
El tiempo de duración de una batería depende del uso y el mantenimiento, pero puede durar más de dos años. Consulte al técnico.
Si el cliente va a cambiar el agua destilada de la batería debe hacerlo cada dos o tres meses.
Si no se va usar el auto por un cierto tiempo, debe desconectar la batería. Esto ayudará a que se conserve mejor y dure más.
Enciende tu auto cada tres días para mantener todos los circuitos y el auto en buenas condiciones.
Revisar frenos da seguridad
El mantenimiento de los frenos es la fase más delicada en el negocio automotor. Es la que ofrece la seguridad a los conductores, ya que un buen frenado puede salvar la vida de muchas personas. Los chequeos deben ser permanentes y más urgentes cuando se desgastan las pastillas y zapatas, que son útiles para los frenos. El desgaste se origina por el kilometraje recorrido y los frenados constantes de los usuarios en los viajes largos. Las pastillas son las que se encargan de detener las ruedas.
Los expertos recomiendan a los clientes adquirir vehículos con frenos ABS, que permite un antibloqueo. Cuando un conductor frena bruscamente, se pierde estabilidad ya que las llantas dejan de rodar pero con el sistema ABS los neumáticos siguen su marcha lentamente para evitar que se pierda la dirección y se pueda controlar.
Si no se cambia el líquido el pedal del freno parece esponjoso y se reduce la potencia de parada.
Si no hay mantenimiento de frenos habrá menor seguridad del conductor debido a la reducción de la potencia de parada del sistema de frenado.
Cuando se realizan viajes es necesario hacer un chequeo preventivo y más si planifica un recorrido extenso.
Si el vehículo circuló por vías llenas de agua o en lluvias es recomendable que también se hagan los chequeos de prevención.
Si se cambian los empaques o pastillas de frenos se debe revisar la calidad.
Las recomendaciones adicionales
LA SUSPENSIÓN Y SUS CHEQUEOS
Son parte del mantenimiento vehicular. Es un componente de los amortiguadores, que ayudan a transitar por caminos rocosos sin afectar las demás piezas. El mantenimiento se realiza constantemente pero se cambian entre los 40 000 y 80 000 kilómetros.
EL CUIDADO DE LOS CARROS USADOS
Hay automotores que todavía cuentan con carburadores y no con inyectores. Ambos cumplen la función de permitir el ingreso de la gasolina para la combustión y arranque del motor. Los mecánicos recomiendan hacer chequeos permanentes a los usados.
LAS LUCES DE LOS AUTOMOTORES
Los cambios de las luces depende del uso que tengan. Los carros que viajan más en las noches tendrán que revisar más seguido los faros mientras el que circula por el día durará más. Las guías también deben ser revisadas en cada mantenimiento que se realice.
EL TERMÓMETRO DEL COMBUSTIBLE
Cuando los vehículos tienen más de 100 mil kilómetros de recorrido la demanda de combustible aumenta ya que hay desgaste en el motor y sus componentes. Ahí el uso de la extra o eco país es la recomendable. Los aditivos ayudan a mejorar el octanaje para la potencia.
EL AIRE ACONDICIONADO
El consumo de combustible solo por el aire acondicionado llega a ubicarse en un 20%. Es decir, en un viaje con aire a condicionado la gasolina se terminará más rápido. Es recomendable que se use el aire natural en los viajes para ahorrar combustible.