Entrevista a Xiana Méndez, Secretaria de Estado de Comercio de España
¿Cuál fue el objetivo de su visita al Ecuador?
Lo principal es brindar el apoyo desde España al país y, en este momento que hay un Gobierno nuevo, retomar ese diálogo que tenemos siempre de gobierno a gobierno, porque Ecuador ha sido siempre un sitio estratégico. Queremos que sepan que podemos colaborar en esa agenda que Ecuador tiene por delante, de recuperación económica y de inclusión social.
¿Cómo está viendo España este giro? El Presidente de Ecuador ha hablado de impulsar el tema de la inversión, de ir hacia acuerdos comerciales.
Desde el punto de vista económico, de comercio e inversión es muy positivo. Es fundamental fortalecer tanto el comercio como la importación y exportación, así como la atracción de inversión al país. Son asignaturas pendientes para Ecuador, que tiene que resultar comparativamente más atractivo respecto a otros socios también en la región.
Cuando usted dice que España está abierta a apoyar al Ecuador ¿a qué proyectos se refiere?
Desde luego, en la secretaría de Estado y Comercio del Gobierno de España, tenemos instrumentos para la internacionalización de las empresas de todo tipo, préstamos, instrumentos de cobertura de riesgo, etc., pero sobre todo está el aporte que pueden hacer las empresas españolas. Ellas pueden ofrecer transferencia de tecnología e inversión.
¿En qué áreas?
Energías renovables e infraestructura. Ahí las empresas españolas son muy competitivas, un ejemplo es el Metro (de Quito). También han participado en hospitales, en el área de telecomunicaciones y hay campos de interés futuro como digitalización, servicios, turismo y agroindustria.
La inversión creció el año pasado. ¿Por qué?
El flujo de España en 2020 en Ecuador fue muy significativo y refleja la confianza que se deposita en este país. España fue el mayor inversor por delante de Estados Unidos y Canadá.
¿Cómo se perfila la inversión de España este año?
Hay buena expectativa. La prima de riesgo ha bajado y eso tiene que combinarse con otros factores, como una agenda económica, que se tendrá que diseñar en las próximas semanas. Las empresas españolas estarán muy pendientes.
Otro factor para crear confianza es un nuevo Tratado Bilateral de Inversiones (TBI) con España ¿Hasta qué punto se ha llegado?
Fue una lástima que hace cuatro años se denunciara ese TBI, que tantos frutos había dado. Nuestro TBI sigue vigente hasta el 2022 y, a partir de ahí, hay una cláusula de supervivencia. Proponemos a Ecuador seguir con el TBI actual y que pueda volver a entrar en vigor. Si no es así, negociar un TBI de última generación, como el que acabamos de formalizar con Colombia.
¿Qué contiene ese TBI?
España fue el primero en firmar un TBI de ese tipo en la Unión Europea, el cual está avalado por la Comisión Europea. El tratado busca responder a preocupaciones muy legítimas que se han generado en los últimos años como el hecho de que cada país tiene derecho a regular internamente. Ese tipo de aspectos está en este nuevo TBI con Colombia. Además, promovemos un tribunal multilateral de inversiones permanente porque hoy los jueces de los tribunales de arbitraje son elegidos por las partes y esto, a veces, puede generar que sean parciales. El nuevo TBI dice que cuando se cree ese tribunal multilateral, Colombia y España estudiarán adherirse a esa instancia.