El ministro de Finanzas, Richard Martínez, y el secretario del Gabinete, Juan Sebastián Roldán, anunciaron renegociación de la deuda, este lunes 6 de julio del 2020. Foto: Cortesía Secom
El Ministerio de Finanzas rechazó la contrapropuesta planteada por tenedores de bonos minoritarios, que representan cerca del 25% y 30% de algunos tramos de la deuda que el país busca renegociar.
Esta mañana, la Cartera de Finanzas señaló que lo planteado por estos tenedores minoritarios es una propuesta “perder-perder”. El Gobierno pidió a estos tenedores que comprendan la precaria situación de la economía de Ecuador y se unan a la mayoría de acreedores, que ya han aceptado la propuesta del Gobierno.
El grupo que hizo la contrapropuesta se denomina “Comité Directivo” y está compuesto por firmas como Amundi (UK) Limited, Contrarian Capital Management LLC, Grantham Mayo Van Otterloo & Co. y T Rowe Price Associates, Inc., junto con algunos tenedores del bono 2024.
Estos tenedores no han aceptado todavía la propuesta inicial de reestructuración de deuda que presentó el Gobierno de Ecuador el pasado 6 de julio del 2020.
En un comunicado emitido este martes 21 de julio del 2020 el Ministerio de Finanzas señaló que la contrapropuesta que hicieron estos acreedores requiere “un enorme sacrificio adicional de Ecuador”.
La propuesta inicial del Ecuador ya cuenta con la aprobación de cerca del 60% de acreedores, entre ellos los mayores grupos de inversores del mundo, como BlackRock y Ashmore.
Para que la reestructuración de la deuda sea posible en los términos que espera Ecuador se requiere el 66% de aprobación de los tenedores hasta el 31 de julio del 2020.
El Gobierno dijo esta mañana que no está de acuerdo con la forma en la que el “Comité Directivo” que agrupa a estos bonistas minoritarios reaccionó a su propuesta inicial y por ello no hará concesiones, pues considera que “pretenden descarrilar un proceso que se ha llevado a cabo de buena fe y ha dado un resultado justo y equilibrado”.
Según Finanzas, la contrapropuesta pide una tasa de interés del 9,5%, que es más alta que la tasa máxima de cupón de los bonos actualmente, del 6,9%.
La propuesta además plantea que el Fisco reciba “dinero nuevo” por alrededor de USD 600 millones, a cambio de aumentar los pagos del servicio de deuda (amortización e intereses) en USD 1 500 millones durante el período 2022 y 2025.
Finanzas dijo que con esta contrapropuesta el servicio de deuda anual adicional representaría casi la mitad de lo que el Fisco destina a programas anuales de asistencia social.
La contrapropuesta además plantea como condición que Ecuador cumpla Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas, pero Finanzas dijo que para cumplirlos “se necesita mucho más que fondeo costoso en el corto plazo”.
El Gobierno rechazó la contrapropuesta del Comité Directivo porque es, en términos netos, “demasiado onerosa para el país y erosionaría de manera dramática los esfuerzos para restablecer la sostenibilidad de la deuda, socavando así la calidad de los bonos ecuatorianos en manos de los inversores”.