Imagen de Archivo de manifestantes que queman llantas y bloquean el puente Virú en un tramo de la Panamericana Norte, en la región La Libertad, al norte de Lima (Perú)l el 4 de diciembre del 2020. Foto: EFE
La misión de la Oficina de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos que investigó los incidentes ocurridos en las protestas de finales de 2020 en Perú concluyó el martes 12 de enero del 2021 que la Policía “hizo un uso innecesario y excesivo de la fuerza” y se incumplieron los estándares internacionales de derechos humanos.
La misión, que llevó a cabo sus investigaciones en Lima del 17 al 22 de noviembre, destacó entre otras conclusiones que los agentes de Policía no hicieron distinción entre manifestantes pacíficos, que integraban la mayor parte de las protestas, y una minoría que presuntamente actuó de forma violenta.
La alta comisionada de la ONU para derechos humanos, Michelle Bachelet, señaló al publicarse los resultados de la misión que “el Estado debe defender el derecho de las víctimas y sus familias a la justicia, la verdad y la reparación, incluida la no repetición”.