Durante las últimas semanas, las milicias kurdas han acorralado a los yihadistas y sus familiares en la localidad de Al Baguz, situada en el este del río Éufrates y cerca de la frontera con Irak. Foto: AFP
Las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), lideradas por milicias kurdas, anunciaron este martes 19 de marzo de 2019 la detención de un grupo de yihadistas supuestamente relacionados con el atentado suicida en Manbech del pasado 16 de enero de 2019, que terminó con la vida de 19 personas, entre ellos cuatro soldados estadounidenses.
El portavoz de las FSD, Mustafa Bali, indicó a través de la red social Twitter que las milicias kurdas capturaron a un grupo de “sospechosos” de estar relacionados con el atentado yihadista del pasado 16 de enero en la región de Manbech, en el norte de Siria, en el que murieron “varios estadounidenses y combatientes de las FSD”.
Cuatro norteamericanos murieron y otros tres resultaron heridos durante este ataque suicida reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), además de otros cinco combatientes sirios y diez civiles.
El atentado se produjo cinco días después de que Estados Unidos comenzara la retirada de sus tropas de la república árabe, dónde han apoyado a las FSD en su lucha contra el EI en Siria.
Durante las últimas semanas, las milicias kurdas han acorralado a los yihadistas y sus familiares en la localidad de Al Baguz, situada en el este del río Éufrates y cerca de la frontera con Irak.
Bali aseguró hoy a través de Twitter que sus unidades han controlado por completo “un campamento del EI” en esta localidad, pero aclaró que esto “no es un anuncio de la victoria, aunque sí un progreso significativo” en la lucha contra los extremistas.
Desde que el pasado 9 de febrero las milicias kurdas anunciaran el inicio de la “batalla final” contra el último reducto del EI, miles de combatientes y sus parientes han salido del cerco rindiéndose ante las milicias kurdas.
La liberación de Al Baguz, supondría la victoria de las FSD y la derrota definitiva del grupo radical que proclamó su califato en Siria e Irak en el año 2014, implantando el terror en todos los territorios que se encontraban bajo su dominio.