La onda expansiva de la detonación en el Cristo del Consuelo se sintió hasta en 10 cuadras a la redonda. Vecinos de este popular sector del sur de Guayaquil se levantaron aterrorizados la madrugada de este domingo, 14 de agosto de 2022.
Entre los moradores recuerdan que el estruendo fue tan fuerte que las ventanas de vidrio se sacudieron y se rompieron en pedazos. Los objetos livianos como floreros, macetas y cuadro también se cayeron al suelo.
En un inicio pensaron que se trató de un terremoto. Así lo relató una mujer que vive a dos cuadras de la calle Ocho, en donde se registró la detonación. Ella contó el susto que se llevó a los canales de televisión que acudieron a esa zona en la mañana.
Otro hombre, que vive a cinco cuadras de los hechos también dijo que el sonido ensordecedor lo levanta de un tajo de la cama. Él salió corriendo a la calle para ver qué ocurrió.
En medio de la noche y sin luz escuchaba gritos y llanto. “Las calles estaban llenas de polvo y la gente corría ensangrentada. Unos se subían a motos de sus parientes para ir a los hospitales. Los más graves esperaron a las ambulancias”, relató.
En eso coincide otra mujer que llegó hoy a las 08:00 a ese sector, pues su familia vive justo al frente del lugar de la detonación. “Gracias a Dios mi familia no estaba en la casa. Todos estamos bien, pero dicen que la fachada está destruida. No me dejan entrar para ir a ver”, dijo.
Hasta la tarde, en el Cristo del Consuelo la gente barría las calles y recogía vidrios. Vehículos de la empresa de electricidad también llegaron para levantar los cables que estaban en las calzadas. La Policía aún investiga qué tipo de explosivos se utilizaron en este atentado, que se atribuye a bandas del narcotráfico.