El abuso que Paola Guzmán vivió en 2002 sigue ocurriendo en Ecuador. En su memoria, esta fue la Semana de la Lucha contra la Violencia Sexual en las Aulas. Pero en estos días también se conoció que un niño de 8 años fue víctima de abuso en el baño de una escuela de Guayaquil.
La conmemoración, en vigencia desde 2020, es parte de la sentencia dictada por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) sobre el caso.
El organismo regional concluyó que el Estado ecuatoriano es responsable de que Paola se haya suicidado, tras sufrir abusos sexuales en su colegio durante dos años.
Esta semana, durante los actos conmemorativos efectuados por el Ministerio de Educación, la Cartera de Estado señaló que el nombre de Paola es un símbolo de la lucha “para que no se repita el delito de violencia sexual”.
Otra de las disposiciones de la Corte fue la garantía de no repetición y para eso todavía están pendientes acciones por parte del Estado, a pesar de que su aplicación en el sistema educativo es urgente para cumplir con la sentencia, señala Sybel Martínez, directora de Rescate Escolar.
Una de las acciones dispuestas es generar estadística actualizada, desagregada por edad, sexo y procedencia de las víctimas.
Aquello permitirá saber cuál es su situación, señala Martínez, quien añade que “esto no está ocurriendo, o si los datos existen no son de acceso público y se deben conocer, porque es la única forma de hacer política pública para disminuir este problema”.
En Ecuador hay más de 4,3 millones de estudiantes, a los cuales se debe proteger a través de la sentencia de la CorteIDH. Esta semana, el Ministerio recibió 1 800 propuestas, hechas por alumnos de 150 planteles educativos del país, para erradicar la violencia sexual en los ambientes educativos.
La estudiante Darla Góngora, de Portoviejo, dijo que es importante hablar de la violencia sexual y tener información precisa, sin miedo a ser juzgados. “Queremos colegios donde podamos confiar y que si algo malo pasa, nos crean, nos protejan y nos acompañen”.
Mientras tanto, las familias del plantel involucrado en el nuevo caso responsabilizaron a la institución educativa por lo ocurrido.
Currículo
Incorporar contenidos, materiales educativos y libros de texto vinculados a la educación sexual integral basada en evidencia científica es uno de los pedidos de las organizaciones de derechos para prevenir la violencia sexual en el contexto educativo.
Vigilancia
Dentro y fuera del aula, docentes, inspectores y demás funcionarios deben estar atentos a comportamientos inusuales en un estudiante o un grupo, de modo que se comunique a consejería estudiantil y esta active atención oportuna para evitar la violencia.
Mecanismos
La capacitación de docentes y autoridades es clave para prevenir la violencia sexual. También es necesario el diseño de protocolos que faciliten la denuncia y la atención de estudiantes víctimas de abuso; además de un plan de reparación integral.
Contenido
La educación sexual desde los 3 años permite que los niños conozcan su cuerpo y sepan que nadie los puede tocar. Tanto en el hogar como en la escuela, las partes íntimas deben ser llamadas por su nombre: pene y vagina, de manera que los niños lo normalicen.
Enfoque
La perspectiva de género y derechos humanos como un principio pedagógico es una necesidad. También la salud menstrual, la paridad de género en actividades escolares, el tratamiento de los derechos de las mujeres y la eliminación de estereotipos.