La Policía Nacional informó a la Fiscalía que recibió denuncias reservadas sobre ciudadanos que enviaban pornografía infantil mediante correos electrónicos y redes sociales.
Era mediados de enero y en las investigaciones iniciales apareció el nombre de Luisa Espinoza, creadora de contenido para adultos en Only Fans.
Su nombre era conocido entre los investigadores, pues le seguían la pista desde el 20 de diciembre, día en que publicó en sus redes un polémico video.
En esa grabación se la veía ofrecer golosinas a menores de edad de un colegio de Guayaquil a cambio de que le tocaran los senos.
Denuncias reservadas
En las denuncias reservadas que recibió la Policía especializada en niños y adolescentes se afirmó que varias personas almacenaban ese material, para después compartirlo por varios canales electrónicos.
A la investigación se unió el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, que brindó asistencia y colaboración a los policías ecuatorianos.
Se recabaron informes investigativos, reportes de la Policía especializada. Incluso se consiguió verificar a quién pertenecía la dirección IP desde la cual se enviaba y recibía el material.
Todo apuntaba a Luisa Espinoza, Ydris Ivonne M. C. y Samuel Wilman Ch. V., que se mostraban como generadores de contenido con muchos seguidores.
Orden de captura
Cuando tras las denuncias reservadas se recabaron pruebas contundentes, los Fiscales pidieron a la Justicia que emitiera las boletas de captura.
Los fiscales y agentes que investigaron el caso tenían una idea de lo que encontrarían, pero la realidad superó a la ficción. Existen entre 8 000 y 10 000 fotos y videos con participación sexual de menores de edad.
Además, se encontró una cámara con la que grababan el material y la computadora donde editaban las escenas.
En poder de los investigadores están los correos y las direcciones IP de las personas que enviaban y recibían la pornografía infantil.
Por eso es que se los procesa por el delito de comercialización de pornografía con utilización de niños, niñas y adolescentes, que tiene una pena privativa de libertad de 10 a 13 años.
Otras denuncias
Aparte de las denuncias reservadas sobre la comercialización de pornografía infantil, los investigadores tienen una nueva línea de trabajo.
Tras la captura de Espinoza y otros dos creadores de contenido, algunas menores denunciaron la forma de actuar de Espinoza.
Señalaron que les enviaba solicitudes de amistad a sus redes sociales y que una vez que la aceptaban, se convertía en amiga y consejera de muchas de ellas.
Las denunciantes tienen entre 14 y 16 años y las une algo en común, sus cuerpos ya están desarrollados con caracteres femeninos.
Escudada en la amistad, la investigada llevaba a las menores a fiestas donde eran presentadas a adultos, los que intentaban tener sexo con ellas.
Más noticias en:
Visita nuestros portales: